
"No deberíamos reducir el déficit a costa de los pobres y los trabajadores", ha añadido el presidente en un discurso desde los jardines de la Casa Blanca, y ha advertido de que, si no se actúa ahora, "toda la deuda caerá sobre los hombros de nuestros hijos"
Obama instó a los legisladores estadounidenses a que aprueben su propuesta e insistió
en que las familias de clase media "no deben pagar más impuestos" que
los millonarios. "Esto no es una lucha de clases. Es pura matemática", remarcó.
Obama
recalcó que no apoyará ningún plan que sitúe toda la carga de reducir
el déficit en la clase medida americana y advirtió de que vetaría
cualquier ley que cambie los beneficios para los que depende del
programa Medicare pero no aumente los ingresos pidiendo a los más ricos y
a las grandes empresas que pagan una cantidad justa.
En este sentido, recalcó
que no va a salir adelante un acuerdo unilateral que perjudique a la
gente más vulnerable del país, e incidió en que cualquier reforma
propuesta debe incluir un incremento de los ingresos para reducir el
déficit presupuestario.
"Debemos recortar lo que no podemos pagar en nombre de lo que realmente importa", incidió.
El
presidente estadounidense ha enviado este lunes al comité formado por
miembros de los partidos republicano y demócrata su propuesta para
impulsar el crecimiento económico y del empleo y con el que buscar
reducir el déficit en tres billones de dólares (2,1 billones de euros)
durante la próxima década, que se añaden al billón de dólares (733.000
millones de euros) que se acordó cuando se elevó el techo de deuda en
agosto.
Un plan hasta 2021
Obama
pretende reducir el déficit hasta el 2,1% del PIB en 2021 gracias a
este plan, sin el cual alcanzaría en esa fecha el 5,5%, mientras que la
deuda caerá hasta el 73% del PIB en 2021, 18 puntos porcentuales menos
de lo que registraría si no se adoptan medidas.
Entre
las medidas creadas, se incluye la denominado tasa 'Buffett' por el
multimillonario estadounidense Warren Buffett, quien propuso que las
grandes fortunas del país contribuyan más a la economía estadounidense, y que tiene como objetivo recaudar 1,5 billones de dólares (un billón de euros).
El
presidente estadounidense propone en general una amplia reforma fiscal
que se basa en principios como impuestos más bajos, recortar exenciones
fiscales y lagunas jurídicas, impulsar la creación de empleo y el
crecimiento y conseguir con la 'Tasa Buffet' que las personas que ganan
más de un millón de dólares al año no paguen menor porcentajes de
impuestos que las familias de clase media.
Además de la reforma fiscal, este plan incluye reducciones
en el gasto del presupuesto de Defensa por valor de 1,1 billones de
dólares (806.000 millones de euros) como consecuencia de la retirada de
las tropas en Irak y Afganistán e incluye su programa de creación de empleo presentado a principios de septiembre.
De
forma paralela, el presidente propondrá también recortes por valor de
320.000 millones de dólares (234.500 millones de euros) en los programas
Medicare y Medicaid, a través de la reducción de gasto inútil y pagos
erróneos, y apoyando reformas que impulsen la calidad de la sanidad.
La
propuesta de Obama es probable que se enfrente al rechazo de los
miembros del partido republicano, que controlan la Cámara de
Representantes estadounidense, ya que se oponen firmemente a las subidas
de impuestos para incrementar los ingresos. elEconomista/InSurGente