Dirigentes del MRS |
NOTA: No soy un economista profesional, por lo tanto mi artículo quizas carezca de la rigurosidad de un economista graduado en Yale. Mis comentarios son solo mis propias observaciones personales en base a la información que circula en medios autorizados y los cuales he verificado con anticipación, incluyendo portales del Congreso de los Estados Unidos.
Escribo este artículo debido a numerosas peticiones privadas que muchos amigos Sandinistas me han hecho por el chat privado. No son el análisis de alguien graduado de la “London School of Economics” de Inglaterra, sino de un ciudadano matagalpino residente en el imperialismo Yanque.
La madrina de la Nica Act es una anti fotogénica ciudadana cubano-americana, la diputada Ileana Ros-Lehtinen, quien representa un distrito congresional de Miami, Florida, la capital mundial del somocismo y estercolero político de Estados Unidos.
Miami es donde han buscado refugio las oligarquías latinoamericanas desplazadas del poder en Cuba, Venezuela y Nicaragua. Ademas de ser la capital mundial del somocismo, Miami es la supuesta puerta de entrada de Latinoamerica a los Estados Unidos y centro internacional de conspiraciones políticas contra los pueblos latinoamericanos.
Si la madrina de la Nica Act es la cubana batistiana Ileana Ros-Lehtinen en la Camara de Representantes de Estados Unidos, el padrino es el también cubano batistiano Ted Cruz, senador republicano de Texas. Jimmy Carter dijo durante la ultima campaña electoral presidencial que Cruz era peor que Donald Trump.
La Nica Act es una especie de sentencia de muerte de una superpotencia contra Nicaragua un país 200 veces mas pequeño que ellos en geografía y 50 veces mas pequeño en población y unas 500 veces en términos financieros y económicos.
Es una sentencia condenatoria del supuesto país campeón de la libertad, la democracia, los derechos humanos y el estado de derecho.
Pero en este caso, Estados Unidos se erije en fiscal acusador, en juzgador y en verdugo a la misma vez, sin seguir ningún proceso debido, garantizado en la constitución de los Estados Unidos.
Pero, dirán los traidores y felones que dejaron el ombligo en Nicaragua pero piensan como gringos, “Nicaragua no se rige por la constitución de los Estados Unidos”.
Exacto. Un país que para sancionar a Nicaragua, no le garantiza la oportunidad de defenderse, y actúa como juez y parte a la vez.
Estados Unidos se considera con derecho a decirle a otra nación soberana como debe gobernarse, como debe aplicar sus leyes internas aunque obviamente, jamás aceptara que nadie les diga a ellos como gobernarse dentro de sus fronteras.
La potencia del norte, ni siquiera acepta que sus soldados sean juzgados fuera de las fronteras estadounidense si estos cometen delitos comunes como violar mujeres y cometer asesinatos. Por esa razón no han firmado el estatuto de Roma del cual se origina la Corte Penal Internacional.
Estados Unidos tampoco ha firmado el protocolo de San José que dio origen a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, lo cual no les impide acoger físicamente en Washington la sede de la CIDH, donde tiene sus oficinas y aun cubrir la mayor parte de su presupuesto.
Estados Unidos usa a la CIDH para castigar a otros países, pero no permite que el mismísimo instrumento que usan para castigar a otros países, sea usado contra ellos. La CIDH no tiene jurisdicción sobre Estados Unidos precisamente porque se han negado a firmar su convención.
La Nica Act fue concebida en conciliábulos en Miami entre la infame Ros-Lehtninen y un grupo de Nicaragüenses, culpables del delito de felonía o alta traición a la patria, tal como los definio el mas ilustre de todos los nicaragüenses, el general de hombres libres, Augusto Cesar Sandino.
Dicho instrumento de muerte nació alrededor de un año antes del fallido intento de golpe de estado suave contra el gobierno del presidente Daniel Ortega, razón por la cual no puede alegarse que fue por los crímenes de genocidio contra los “pacificos” estudiantes que asesinaron a 22 policias con huleras y morteros.
En esencia la Nica Act cuyo nombre completo es “Ley Condicional de Inversiones Nicaragüenses,” significa, según el articulo 4 de dicha ley que “el presidente de Estados Unidos deberá instruir al Director Ejecutivo estadounidense en cada institución financiera internacional a que use la influencia de Estados Unidos para oponerse a préstamos que sean para el beneficio del gobierno de Nicaragua, excepto aquellos que sean para cubrir necesidades humanas básicas o para promover la democracia, a menos que el Departamento de Estado certifique que Nicaragua está tomando pasos efectivos para:
Celebrar elecciones libres supervisadas por observadores electorales creíbles tanto nacionales como internacionales;
Promover la democracia y un sistema judicial y electoral independientes;
Fortalecer el imperio de la ley;
Respetar el derecho a la libertad de asociación y de expresión;
Combatir la corrupción, incluyendo investigar y procesar a funcionarios gubernamentales corruptos y proteger el derecho de los partidos políticos de oposición, periodistas, sindicalistas, defensores de los derechos humanos y permitirle a otros activistas de la sociedad civil a operar sin interferencia.
EN OTRAS PALABRAS: Estados Unidos exige que sus tarifados, sus agentes mercenarios como Miguel Mora, Felix Maradiaga, Carlos Fernando Chamorro, Vilma Nunez de Escorcia, Ana Quiroz, Violeta Granera, Juan Sebastian Chamorro, solo para mencionar unos cuantos, tengan luz verde para hacer y deshacer en Nicaragua porque son los intocables de Estados Unidos.
La oposición antisandinista, vive pegando alaridos de mica mal tirada por su supuesto “estado de derecho” pero le dan la bienvenida a la abierta injerencia de otro país en los asuntos internos de Nicaragua, en donde Estados Unidos, quiere a la fuerza anular las leyes de Nicaragua para proteger a sus mercenarios.
Asi como los obispos pidieron via libre para los tranques, mientras le exigían al presidente el acuartelamiento de las fuerzas policiales, para delicia del narcotráfico y la delincuencia, asi Estados Unidos exige la máxima impunidad para sus propios operadores políticos, a quienes llama “independientes”.
Asi, exigen que se respete a los periodistas “independientes”, pero independientes de que o de quien? cuando son totalmente dependientes de la embajada de las barras y las estrellas.
Piden Cortes y Consejos Electorales “creibles” pero que significa creibles? Creíbles para los yanques?
Que los gringos puedan confiar en ellos que les van a entregar la soberanía en bandeja de oro.
Los soldados del ejército de Estados Unidos pueden cometer toda clase de atropellos y crímenes en los países en donde se encuentran en misión.
Si la policía catracha o tica por ejemplo, agarra a un marinito forzando a una chavala hondureña o costarricense, la policía NO SE LO PUEDE LLEVAR PRESO, aunque el policía lo haya sorprendido en el acto mismo de violación.
El policía tiene que entregar al marinito pison al embajador de Estados Unidos en el país donde se cometió el delito. Otro tanto sucede con los sotanudos católicos. Tanto cura asesino que tiene las manos manchadas de sangre en los tranques, pero cual de ellos ha caído preso??? Ni uno solo.
Si ustedes vuelven a leer los párrafos traducidos de la Nica Act, eso es exactamente lo que Estados Unidos pide para sus mercenarios activistas, pagados por los yanques para promover la “democracia” y los derechos humanos, pero como los entiende Estados Unidos, no el país agredido.
La constitución del país agredido (Nicaragua), la interpretación de la carta magna que le corresponde a la Corte Suprema de Justicia, no al Departamento de Estado de un país extranjero, no significan nada para los yanques, mucho menos para los traidores a la patria. Todo, todo tiene que ser hecho a imagen y semejanza de los yanques.
La Nica Act es la mas escandalosa confesión del fracaso de los Estados Unidos en Nicaragua. Porque? Porque los organismos multilaterales que prestan dinero a los países del tercer mundo, lo hacen bajo estrictos protocolos internacionales y rigurosos criterios financieros y económicos antes de aprobar un préstamo.
Sabedores que Nicaragua está en toda la capacidad de “calificar” y reunir todos los criterios exigidos por la banca internacional multilateral para que sus préstamos sean aprobados, precisamente por lo sano de su economía y la seriedad de su gobierno, han obligado a los traidores a recurrir a mecanismo extranjeros y extra jurisdiccionales y obligar POR LEY de otro país a rechazar los prestamos de Nicaragua.
Como todo pais tercer mundista Nicaragua necesita esos préstamos internacionales para seguir construyendo hospitales, escuelas, universidades, laboratorios, mas puentes y mas infraestructura.
Si el desempleo crece en Nicaragua, si aumenta la desnutrición de nuestros niños, si no hay suficiente atención a los enfermos en los hospitales, si no hay suficientes escuelas para los niños, si crece la pobreza, no es porque el "corrupto" gobierno de Nicaragua no reunía los requisitos técnicos para que le aprueben los prestamos sino porque asi lo mandata una ley de otro pais que quiere decirnos a los nicaragüenses hasta a que horas debemos levantarnos o acostarnos.
La Nica Act también logrará el milagro de que los nicaragüenses cerremos filas alrededor del único gobierno en 500 años que ha velado por los intereses de los mas pobres.
La Nica Act, simplemente va a fortalecer la voluntad de los Sandinistas.
Si hace 40 años el pueblo derramó su sangre para librarnos de la bota yanka de los Somoza, hoy nos volveremos mas militantes, mas disciplinados y mas decididos a defender el futuro de las nuevas generaciones de nicaragüenses, que ni nos vendemos, ni nos rendimos.
Suficiente sangre se ha derramado en Nicaragua por generaciones. Desde El Espino Negro y la gesta heroica de Sandino hasta la agresión del golpe suave, han muerto mas de 150 mil nicaragüenses, incluyendo los 22 policias asesinados por “pacificos” estudiantes con huleras.
Por esos muertos nuestros muertos, juramos defender la Victoria. Luchamos contra el Yanque, enemigo histórico de la humanidad. Patria Libre o Morir, Patria o Muerte, Venceremos. NO PASARAN.