Desde que Jeremy Corbyn ganó el reto a su liderazgo el año pasado (que de hecho fue un intento de golpe de estado organizado por el ex líder Blair y el establishment británico) por más votos que en su primera victoria en la contienda por el liderazgo del Partido Laboral en 2015, he pensado que si Theresa May llamara a una elección adelantada, él la ganaría.
Los vientos del cambio están de su lado, no hay duda de ello. Olvídense de las encuestas; Corbyn está atrayendo multitudes más grandes de las que Blair atrajo hace 20 años, y el "Nuevo" Partido Laborista de ese monstruo ganó la elección de 1997 con una gran mayoría.
Mientras tanto, Theresa May se ocultó del escrutinio público en las recientes semanas, rehusándose incluso a participar en debates de televisión, mientras que casi nadie se presentaba a sus encuentros de campaña.
Una victoria del "populista" Corbyn para un "Viejo" Partido Laborista en el Reino Unido, sería el último en una serie de terremotos políticos a través de Occidente en años recientes.
El constante balido de los medios del Reino Unido acerca de cuán "inelegible" es Corbyn ha probado ser inversamente proporcional a, a) cuán popular es este hombre, y b) cuánto odia la mayoría de la gente a las élites atrincheradas.
Así que, con toda justicia, Corbyn tendría la elección en la bolsa.
Lo que hay que tomar en cuenta, sin embargo, es la cantidad de robo de votos que los servicios de seguridad británicos pueden estar dispuestos a arriesgar. Todo está en juego para ellos en este momento: Brexit, la independencia de Escocia, la reunificación de Irlanda; usted puede apostar que todas las luces están parpadeando en rojo en el GCHQ, Whitehall, el palacio de St James y la Oficina del Exterior.
La existencia misma del Reino Unido está en cuestión, las alianzas internacionales del país están en movimiento, y el "cambio democrático de régimen" amenaza desde adentro.
Asumiendo que tengan éxito en contar los votos "correctamente" (garantizando una victoria del Partido Conservador), entonces me temo que los ataques de Manchester y Londres pueden ser suficientes como una narrativa creíble del porqué un grupo de gente realmente inelegibles como Theresa May, Boris Johnson y Amber Rudd volverían al gobierno.
Su campaña estaba en caída desde mediados de mayo, y lo único que regresó a la Primera Ministra May de vuelta a la televisión, y por lo tanto de vuelta "con el mensaje correcto" en lugar de ser una figura de ridículo, fueron esos dos eventos sangrientos.
Nadie está hablando en esta ocasión acerca de la interferencia rusa en la elección.
En lugar de ello, los británicos se preguntan cómo tomar esta increíble intervención del Estado Islámico prácticamente en la víspera de su elección. Independientemente de su opinión acerca de la posibilidad de que el gobierno lleve a cabo complots siniestros para efectuar o facilitar ataques terroristas, usted no puede dejar de notar que, en esta situación, el Estado Islámico ha venido a ayudar a los Toris, intencionalmente o no, y por lo tanto al establishment, al situarse estratégicamente en contra del reto democrático más significativo al status quo en la historia moderna del Reino Unido.
Por más de un año, el gobierno británico ha eludido críticas repetidas de sus enormes ventas de armas a Arabia Saudita, así como las repetidas preguntas de qué hacen los saudíes con esas armas.
La secretaria del interior Amber Rudd, en un debate electoral en su distrito la semana pasada, literalmente calló cualquier discusión acerca de las conexiones de Arabia Saudita con el Estado Islámico, mientras que May enterraba el reporte sobre el financiamiento de Arabia Saudita a los grupos terroristas islámicos, el mismo día que Corbyn declaró que "debemos tener algunas conversaciones difíciles con Arabia Saudita."
Incluso si los conservadores "ganan" mañana, simplemente estarán retrasando por un corto tiempo la inevitable caída de las políticas corruptas, elitistas y anti-humanas que han definido al establishment británico por demasiado tiempo.
Considere el hecho de que por medio del robo de la elección general (ya sea directamente o a través de las mentiras y la propaganda) para que puedan continuar vendiendo armas a los cortacabezas mientras imponen mayor austeridad en casa, los conservadores están simplemente tomando otro mandato para continuar con las mismas políticas que han volteado a la gran mayoría del pueblo británico en su contra.
Uno se pregunta ¿dónde creen estas figuras del establishment que va a terminar todo esto? ¿En campos de concentración? Oh, esperen...
Niall Bradley es editor de Sott.net desde 2009. Es tambien editor de la versión impresa de Sott.net, Dot Connector Magazine y ha aparecido como comentador de PressTV. Niall ha escrito numerosos artículos para Sott.net, en donde se focaliza en analizar las tendencias geopolíticas en el contexto del denominado cambio climático.
https://es.sott.net/article/53007-El-Estado-Islamico-influye-sobre-las-elecciones-del-Reino-Unido-Funcionara-Solo-con-la-ayuda-de-un-robo-masivo-de-votos
