Apenas aterrizó en el aeropuerto de Malpensa, encontró al Ros de los Carabinieri esperándolo: el combatiente extranjero de Rovereto Alessandro Bertolini, de 29 años, investigado por la Dirección Distrital Antimafia y Antiterrorista de Génova, fue detenido.
Al menos desde 2016, según reconstruyeron los militares del Ros de la capital de Liguria, habría luchado junto a las milicias prorrusas por una tarifa.
Actividad que lo habría llevado a participar, escribe el Corriere del Trentino, "a acciones predestinadas y violentas, dirigidas a cambiar el orden constitucional o violar la integridad territorial del gobierno ucraniano, un estado extranjero del cual no era ni ciudadano ni residente permanente, sin ser parte de las fuerzas armadas de cualquiera de los partes en el conflicto".
Simpatías de extrema derecha
En 2017 habían trascendido las simpatías de Bertolini por la extrema derecha: el joven de 29 años había aparecido en un reportaje en el programa Nemo de Rai 2, realizado por la periodista Valentina Petrini.
Y en aquella ocasión, sosteniendo un rifle mientras estaba en Donbass, dijo que «siempre había soñado con ser soldado desde niño, y que no había tenido ninguna oportunidad en Italia.
Como ideales me gustaba Forza Nuova. Incluso los rusos se acercan mucho a ellos en busca de ideas. Cuando la gente de izquierda viene aquí, se les niega inmediatamente».
Para luego añadir: «Veo a Europa cada vez más en ruinas. Trabajo precario, inestabilidad.
La inmigración que está teniendo lugar en Europa no es algo bueno. Ayudar a la gente está bien, pero la inmigración descontrolada acaba tarde o temprano en un caos.
Ahora Bertolini está preso en Busto Arsizio (Varese), y de momento ha hecho uso del derecho a no contestar.
Su procedimiento será seguido por el Tribunal de Génova, y su defensa está encomendada al abogado Massimiliano Luigi Scialla. La audiencia preliminar está fijada para el próximo mes de septiembre.
La investigación
En cualquier caso, Bertolini no es el único en la mira de la fiscalía genovesa. Otros mercenarios ya habían sido detenidos anteriormente. Todavía son ilocalizables Gabriele Carugati de Varese (hijo del ex entrenador de la Liga en Cairate, Silvana Marin), y Massimiliano Cavalleri, conocido como «Spartacus».
Ambos pelearon en Ucrania junto a Bertolini y Andrea Palmeri, jefe ultra del Lucca Calcio (condenado en primer y segundo grado aunque aún fuera).
Este último, según la acusación, seguiría siendo uno de los referentes para el reclutamiento de mercenarios.
Las investigaciones sobre el mundo de los ultras de extrema derecha habían comenzado desde 2013, cuando la aparición, en La Spezia, de escritos elogiando al comandante de las SS Erick Priebke había disparado la alerta de la Fiscalía de Génova.
Los conocimientos sobre los skinheads en Liguria habían permitido rastrear a los mercenarios reclutados para la guerra en Donbass en apoyo de los prorrusos: tres de los seis reclutados ya habían sido condenados en 2019.
A saber, Vladimir Vrbitchii, un trabajador de origen moldavo condenado a 1 año y 4 meses, Olsi Krutani, un albanés que se hace llamar ex oficial de las tropas aéreas rusas, y el italiano Antonio Cataldo, ambos condenados a 2 años y 8 meses.
Los tres fueron arrestados en 2018 por cargos de conspiración para reclutar y financiar combatientes mercenarios.
Foto de portada: Corriere del Trentino
https://www.open.online/2023/07/01/arrestato-alessandro-bertolini-foreign-fighter-donbass-russi/
