Una encuesta reciente del instituto norteamericano Pew Research Center publicada el lunes, indica que ciudadanos de diversos países de Oriente Medio ven a Bibi Netanyahu como el líder más odiado de la región.
Entre los entrevistados, el 71 % de los tunecinos, el 79 % de los turcos, el 96 % de la población jordana y el 99 % en El Líbano, ven a Netanyahu "muy desfavorablemente" (un eufemismo de la encuestadora para sugerir que a nadie le molestaría que este sujeto se fuera a vivir para siempre a un iglú en el centro del polo norte).
Aprovecho la ocasión para expresar mis más sinceras felicitaciones al primer ministro israelí por este destacado lugar, que con grandes esfuerzos durante los últimos años, ha "ganado" merecidamente. Sin duda, la brutalidad y vileza con la que ha ejercido su cargo le han garantizado una victoria justa.
Hay que reconocer que muy posiblemente la reciente decisión de Donald Trump de trasladar su embajada a Jerusalén y declarar la ciudad como la capital del Estado de Israel no colaboró mucho con la popularidad del premier, y menos aún si sumamos a la arbitraria e impopular determinación del presidente estadounidense, las torpes declaraciones que el mismo Netanyahu con aires de triunfador ha estado desparramando por doquier.
Sin ir más lejos, el lunes pasado, urgió a los países europeos (sin éxito) a reconocer a Jerusalén como la capital israelí durante una rueda de prensa conjunta con la jefa de la Diplomacia de la Unión Europea, Federica Mogherini. En medio de lo que consideramos afirmaciones propias de una mente severamente perturbada, el líder israelí aseguró que este paso "facilitará el acuerdo de paz".
Evidentemente este hombre, o no ha visto los noticieros ni leído los periódicos, o realmente le importa muy poco lo que ocurra a su alrededor porque décadas de impunidad masacrando a árabes y usurpando su territorio le han definitivamente freído las neuronas.
Desde el anuncio de Donald Trump, no sólo el mundo entero en general se ha alzado con una voz disonante, sino que el mundo árabe casi al unísono ha reaccionado violentamente a lo que sin duda es una torpe e insensata decisión. Aún estamos tratando de dilucidar qué estaba pensando el primer mandatario norteamericano en el momento de arrogarse la prerrogativa de "terminar" con décadas de disputa "fallando" a favor de quien a todas luces ha sido el invasor y ha obrado impune y sistemáticamente al margen del derecho internacional.
Por el momento, sólo hemos podido observar que, misteriosamente, tras el anuncio, el congreso de EE.UU. detuvo abruptamente los intentos de impeachment contra Trump de los demócratas... ¿Se habrá hecho con algunos amigos poderoso el jefe del ejecutivo?
Sólo como muestra de la reacción inicial del mundo árabe échele un vistazo a esto:
... y esto es apenas un vislumbre del principio...
https://es.sott.net/article/56921-Encuesta-en-Medio-Oriente-Netanyahu-es-el-lider-mas-odiado-y-Trump-le-dio-una-mano-para-serlo
