El presidente venezolano, Hugo Chávez, ratificó este lunes
que Suramérica es un continente de paz, donde no se permitirá que
Estados Unidos y sus aliados europeos invadan, tal como ocurre en Libia
desde hace meses, situación que consideró “más que un cinismo una
barbarie”, la cual ha dejado más de tres mil civiles muertos.
Resaltó que países como Cuba, Nicaragua, Ecuador y Bolivia abogan por
la libertad de los pueblos y agregó que los gobiernos de las economías
emergentes (Brasil, India, China y Suráfrica) “se manifiestan firmes”
ante las agresiones promovidas por la Unión Europea y Estados Unidos.
“Tenemos que ir en una contraofensiva.
No podemos quedarnos de brazos
cruzados”, agregó el Jefe de Estado, a la vez que recordó que existen
salidas alternas a la invasión de la Organización del Tratado del
Atlántico Norte (Otan), como la hoja de ruta de la Unión Africana.
El presidente Chávez se refirió a la necesaria coordinación y al
trabajo unido en el continente suramericano para ir al contraataque y
retomar el camino de la paz “en un mundo que no se puede quedar callado
ante tanta barbarie”.
El Jefe de Estado exhortó a los países que apoyan a los grupos
procoloniales que mantienen la violencia en Libia, a reflexionar y
establecer mecanismos que permitan alcanzar la paz en la nación
norafricana.
“Lo que nosotros queremos, anhelamos, es que se detenga esa locura,
que Europa reflexione, que el mismo Estados Unidos reflexione y le
pongan un freno a la locura de la guerra”, insistió.
Enfatizó que para solucionar la situación de crisis en Libia “hace
falta verdadera política, que retorne la gran política, hacen falta
verdaderos líderes políticos y que busquemos un acuerdo de paz”.
Chávez se refirió a una conversación telefónica que sostuvo
recientemente con el canciller ruso, Serguei Lavrov, y el Presidente de
ese país, Dimitri Medvedev, y mencionó que ambos dirigentes expresaron
haberse sorprendido por las actitudes desmedidas y violatorias de los
derechos humanos por parte de Estados Unidos y sus aliados contra Libia.
Resaltó que ante la dinámica actual “es importante ver, evaluar y
valorar la nueva posición que tiene el Gobierno ruso, como lo han
expresado el canciller, el presidente Medveded y también el gobierno
chino”.
El mandatario nacional recordó: “Cuando en el Consejo de Seguridad de
la ONU se votó esa resolución, los gobiernos de Rusia y de China, es lo
que creo, no pensaban, por distintas razones que no conocemos nosotros,
que el imperio yanqui, el gobierno de Estados Unidos y sobre todo sus
aliados europeos, iban a llegar a tal nivel de cinismo, de barbarie”.
“El canciller Lavrov me lo decía, ellos quedaron sorprendidos de cómo
aquella gente se lanzó de una vez a violar descaradamente lo que habían
aprobado en el Consejo de Seguridad”, comentó.
Sin embargo, Chávez insistió en abogar por una salida pacífica al
conflicto en Libia, a la que podría llegarse si su pueblo mantiene digna
resistencia.
“Ojalá que la resistencia del pueblo libio permita, en poco tiempo,
que se reflexione y se busque el camino de la paz, y se derrote el
camino de la guerra.
Eso será muy bueno para todo el mundo”, manifestó.
Durante la llamada telefónica, el presidente Chávez también hizo
referencia al tema económico y al declive de las condiciones financieras
de las grandes potencias, y destacó el rol protagónico de la Unión de
Naciones Suramericanas y de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de
Nuestra América (Alba), para crear nuevos mecanismos económicos que
impulsen el desarrollo de Suramérica.
Indicó que Suramérica, además de haberse blindado como una zona de paz, es una luz económica alternativa.
“Dentro de la crisis mundial del capitalismo aparece Suramérica como una luz que no podemos permitir que se apague”, expresó.
“Los imperios tienen un verdadero cáncer, que no tiene cura y es muy
profundo, es un cáncer económico, el modelo económico profundamente
engarzado con el modelo social que fueron creando.
No les va a dar la
economía y la crisis sigue trepidando por dentro”, sostuvo.