Hungría abrió una investigación tras la difusión de un video filmado en un campamento donde cientos de refugiados son tratados como “animales” y en el que se ve a policías arrojar sándwiches de modo aleatorio a personas que imploran por comida.
El video fue grabado por una activista austríaca en el ya varias veces criticado campamento de refugiados de la sureña ciudad húngara de Roszke, el mismo donde la organización no gubernamental Human Rights Watch (HRW) denunció hoy condiciones “inhumanas e insostenibles” para los refugiados.
La activista, Michaela Spritzendorfer, acudió con un grupo de amigos el miércoles pasado a ese centro situado en la frontera con Serbia para entregar alimentos, ropa y medicinas que habían reunido para los refugiados.
Tras entregar la comida y la ropa, le indicaron que debía entregar los medicamentos en el Campo Roszke 1, donde subió a la primera planta y desde allí grabó lo que sucedía durante el reparto de alimentos en el patio inferior, después del mediodía.
En las imágenes se observa cómo los policías húngaros, algunos con cascos antidisturbios y barbijos, arrojan sándwiches a varias decenas de personas de forma aleatoria, con mujeres y niños observando la situación mientras una multitud de hombres lucha por alcanzar la comida.
Los reunidos hacen gestos con las manos para atraer la atención de los policías y así conseguir que les lancen un sándwich.
“No podía creer lo que veía”, explicó Spritzendorfer. Entonces te das cuenta de que les arrojan bocadillos. Saqué la cámara y lo grabé, porque me pareció totalmente irreal”, aseguró. La policía húngara informó hoy que abrió una investigación interna para aclarar los hechos.
La activista consideró que la situación allí es “indigna”, “inhumana” e impropia de los valores que Europa dice defender. HRW sumó su voz a las críticas a las condiciones en el campamento de Roszke, una más entre los múltiples cuestionamientos a Hungría por su reacción al aluvión de refugiados que recibió este año, y que incluyen la construcción de una valla fronteriza, una dura ley anti inmigratoria y militarización del límite con Serbia.
“La situación de los inmigrantes y solicitantes de asilo en Hungría es inhumana e insostenible”, dijo Peter Bouckaert, director de emergencias de HRW, en un comunicado.
“El gobierno húngaro, con la ayuda de los gobiernos de la Unión Europea (UE) y los socios de Naciones Unidas, debería adoptar medidas para poder cumplir con sus obligaciones de proteger a las personas y tratarlas de una forma humana”, agregó.
La organización denunció que en Roszke los refugiados tienen que pasar hasta días en condiciones precarias, con suciedad, sufriendo hambre y sin asistencia médica. HRW, que cita a refugiados en Roszke, señaló que éstos llamaron la atención sobre casos de refugiados que han sufrido ataques cardíacos o convulsiones y hasta de “recién nacidos con fiebre alta y vómitos que no recibieron asistencia médica”.
Las condiciones en las instalaciones de Roszke indican que las autoridades húngaras, incluida la policía, no son capaces de alojar y alimentar al creciente número de solicitantes de asilo e inmigrantes de una manera humana, señala HRW.
“Es indigno que a personas que han pasado meses huyendo de la guerra y que llegan a Europa buscando seguridad se las trate como a animales, con policías arrojándoles bocadillos porque son incapaces de organizarse para entregar a 150 o 250 personas un bocadillo”, criticó Spritzendorfer.
La activista abogó por mejorar las condiciones de los campos de refugiados y abrirlos a organizaciones como Amnistía Internacional (AI) o Médicos Sin Fronteras (MSF). También solicitó que se abran las fronteras para permitir que los refugiados lleguen a Europa y recordó que la solidaridad de la sociedad civil europea está muy por delante de la respuesta de la clase política del Viejo Continente.
El gobierno húngaro está construyendo una valla para sellar su frontera meridional con Serbia y la semana que viene entra en vigor un paquete de medidas legales que tiene como fin frenar la llegada de miles de refugiados que huyen de conflictos en Medio Oriente, sobre todo de Siria.