Los rebeldes sirios ya han recibido los misiles antitanque estadounidenses que forman parte de un programa piloto para luchar contra el Ejército sirio y garantizar que el armamento pesado no cae en las manos equivocadas.
Se trata de los misiles guiados modelo TOW que pueden penetrar cualquier blindaje de tanques, así como fortificaciones e incluso búnkeres a unos cuatro kilómetros de distancia, señala el periódico 'USA Today'.
Este nuevo "programa piloto" está destinado a ayudar a los rebeldes que luchan contra el Ejército de Bashar al Assad y, al mismo tiempo, garantizar que el armamento pesado no caiga en manos de los radicales, señaló un exalto funcionario del Gobierno de EE.UU. que habló con el rotativo bajo la condición de mantener el anonimato.
Ese arsenal sería utilizado por los rebeldes en las ciudades estratégicas como Alepo.
"Van a probarlo primero y ver cómo va", explicó.
La administración de Barack Obama espera que estos misiles lleguen a los grupos moderados, pero algunos analistas aseguran que la poderosa tecnología ya está en poder de grupos terroristas.
Según Jeffrey White, analista político y exfuncionario de la Agencia de Inteligencia de Defensa, esta medida no logrará derribar el Gobierno de Al Assad.
No obstante, el hecho de que los grupos rebeldes sumen victorias en el campo de batalla y consigan más armas atraerá a más reclutas para este bando, apuntó White.
Los TOW son los misiles antitanque más empleados en todo el mundo. El Ejército estadounidense los usó hace 10 años en la guerra de Irak.
Esta misma semana el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, declaró que EE.UU. y sus aliados ampliarán su apoyo a la oposición siria.
Por otro lado, el máximo responsable militar del país negó que los rebeldes vayan a recibir apoyo armado.