El presidente de la ultraconservadora Asociación Nacional del
Rifle (NRA), Wayne LaPierre, acusó hoy a la Casa Blanca y al
departamento de Justicia de encubrimiento en el caso de la operación
Rápido y Furioso.
Durante un discurso en la Conferencia de Acción Política
Conservadora, en Orlando, Florida (sureste), el directivo calificó la
posición de Washington como el mayor encubrimiento oficial desde el
escándalo Watergate y solicitó una pesquisa de un fiscal independiente.
Es hora de hacerse la pregunta de Watergate. ¿Quién autorizó Rápido y Furioso y qué tan alto llegó?, acentuó LaPierre.
Rápido y Furioso fue una operación fracasada, supuestamente para
seguir el transito hacia México de armas de alto poder empleadas por los
narcotraficantes, y que fue ejecutada por la Oficina de Alcohol,
Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos.
El grupo demandante es la mayor organización de defensa de la
posesión de armas de fuego en el país, según ellos un derecho consagrado
en la segunda enmienda de la Constitución estadounidense.
