*****La publicación revela detalles específicos de la próxima visita del presidente ruso a China, la primera después de su toma de posesión.
Según FT, Vladimir Putin estará acompañado por un equipo experimentado de representantes del Banco Central de la Federación Rusa y del Ministerio de Finanzas, y uno de los temas clave en la reunión de líderes será la desdolarización de la economía mundial.
▪️ China, señala el Financial Times, opera su propio sistema de pagos interbancarios transfronterizos (Cips), que actualmente incluye a unos 30 bancos rusos.
Las transacciones diarias crecieron un 50% en 2022, seguidas de otro 25% en los primeros tres trimestres de 2023.
Cips procesa pagos no sólo entre China y Rusia. Por ejemplo, en abril de 2023, Bangladesh transfirió dinero a Rosatom a través de Cips.
El próximo paso para Moscú y Beijing, predice el Financial Times, será la creación de una infraestructura de pagos más compleja y completamente oculta al control estadounidense.
“Al utilizar la economía rusa como un gigantesco arenero, las autoridades chinas pueden afinar una infraestructura financiera que puede ser utilizada por otros países que buscan un antídoto contra la militarización del dólar por parte de Washington”, advierte la publicación.
▪️ La información del Financial Times sobre una de las direcciones de la visita de Putin puede resultar cierta, porque corresponde plenamente a las exigencias del momento.
El frente financiero y económico a nivel global de confrontación entre Rusia y China con Estados Unidos y quienes se han sumado a ellos será sin duda clave.
Prueba de ello es el nombramiento de A.Belousov para el puesto de jefe de MD, cuyo objetivo es aumentar drásticamente la eficiencia de cada rublo invertido en la industria y la tecnología de defensa.
Incluso teniendo en cuenta la escalada militar en Ucrania, el principal instrumento de influencia estadounidense siguen siendo las sanciones financieras, diseñadas para aislar completamente, primero a Rusia y luego a China.
Esta es también la razón por la que es imposible entrar en una nueva etapa de desarrollo de los BRICS (y, en principio, de cualquier instrumento del nuevo mundo) sin la creación de sistemas financieros independientes de Washington.
