El gobierno neoliberal de Gabriel Boric está cerca de asegurar una nueva ley que amplía el derecho de las fuerzas de seguridad a usar armas de fuego contra la población. La Ley Naín-Retamal , propuesta del Poder Ejecutivo, fue aprobada hoy por el Senado para una tercera y última lectura.
La ley amplía la definición de “legítima defensa privilegiada” para justificar el uso de armas letales por parte de uniformados y policías de civil contra la población civil.
Esto ha sido apodado como la "ley del gatillo feliz" por los movimientos sociales que se opusieron a la medida.
La ley de Boric está siendo apoyada por los partidos de oposición de derecha en el Congreso y rechazada por grupos de derechos humanos y partidos de izquierda que formaban parte de su coalición original.
Boris Barrera, jefe de la bancada del Congreso del Partido Comunista de Chile, condena la ley y señaló que esta medida para otorgar a la policía el poder de reprimir se produce justo cuando Chile conmemora los 50 años del golpe de Estado de Pinochet contra Salvador Allende respaldado por Estados Unidos.
El congresista Barrera también recordó la actuación de las fuerzas policiales y militares durante las protestas sociales de 2019, que provocaron más de 30 muertos, miles de heridos y más de 460 personas con lesiones oculares permanentes por disparos de perdigones y bombas lacrimógenas.
El propio Subsecretario de Derechos Humanos del gobierno de Chile, Xavier Altamirano, ha expresado su preocupación de que las normas ignoren los estándares internacionales recomendados por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
El presidente Boric ha seguido atacando a Nicaragua y Venezuela, utilizando afirmaciones falsas sobre los derechos humanos en los dos países, todo mientras insiste en impulsar esta agenda autoritaria dentro de su propio país.
https://mronline.org/2023/04/07/chile-pushes-authoritarian-police-law/
