
Pasan los días y Pablo González permanece incomunicado. Encerrado en una prisión de máxima seguridad. Sin garantías procesales (no ha tenido acceso a su letrado) ni siquiera conocemos su estado de salud psicofísico. Al delirio del estado polaco, se suma el silencio cómplice de los medios masivos y las autoridades del Estado español.
Dos semanas. La Agencia de Seguridad Interior de Polonia detuvo a Pablo González en Przemyśl (cerca de la frontera con Ucrania) durante la madrugada del 28 de febrero, acusándolo de realizar actividades de “inteligencia extranjera”.
Luego de ese momento no hubo más noticias sobre él, ya que en todo este tiempo la familia no ha podido comunicarse con él, ni tampoco su abogado (Gonzalo Boyé).
Es muy poca información que tenemos hasta este momento. En estos días se realizó una entrevista a su familia en la cual ratifica que desconoce cuál es su estado y desde luego niega rotundamente las falsas acusaciones.
Recomendamos la lectura del excelente artículo del periodista Juan Teixeira publicado ayer en Eulixe. Juan conoce a Pablo desde hace 12 años y habla sobre él y su historia.
Y el título es contundente: “Sobre Pablo González y la menguante libertad de prensa” denunciando de esta forma los riesgos inmensos de la falta de libertad de expresión y reclamando ante el vergonzoso silencio mediático e institucional.
Desde el Colectivo Kaosenlared no sumamos a la exigencia de la libertad inmediata del compañero.
Y denunciamos a las autoridades del estado español y a los grandes medios por el silencio que sostienen ante este hecho grave que evidencia el peligro que corre Pablo González y todos/as y cada una de las periodistas que enfrentamos a este sistema corrupto, autoritario que no garantiza nuestros derechos fundamentales.
https://kaosenlared.net/despues-de-14-dias-el-periodista-pablo-gonzalez-continua-secuestrado-por-el-estado-polaco/