George Soros es un especulador financiero estadounidense de origen húngaro. Además, es el fundador de organizaciones filantrópicas como la Open Society.
La reciente filtración de documentos internos de la organización revela sus auténticos propósitos en el mundo, que distan bastante de lo que suele entenderse por 'filantropía'.
Los datos aparecieron en el portal DCLeaks.com y arrojan luz sobre uno de los objetivos principales de la fundación: fomentar una opinión pública favorable a EEUU e intervenir en los procesos políticos que suceden en el mundo.
Europa
En Europa, el nombre de Soros se asocia mayoritariamente al inicio del ataque especulativo del 16 de septiembre de 1992 que provocó la abrupta caída de la libra esterlina.
El episodio, conocido como el 'miércoles negro', supuso una pérdida para el Tesoro de su Majestad de £3.400 millones, mientras que el propio Soros obtuvo cerca de $1.500 millones en ganancias por la venta en corto de la moneda británica.
La reciente filtración de documentos internos de su organización pone al descubierto que sus actividades en el Viejo Continente no se limitan a las maniobras financieras.
Según los documentos publicados, la fundación Open Society se centra hoy día principalmente en el control de la opinión pública europea.
En particular, los informes presentados a Soros antes de las elecciones al Parlamento Europeo contenían una lista de 21 páginas de diversas ONG que recibieron financiación del magnate, con el fin de desacreditar a los movimientos "que entienden a Rusia" y a los que se oponen a la influencia de EEUU en el continente.
Como ejemplo, se destinaron $195.000 a alcanzar un resultado favorable para Ucrania en el referéndum que se celebró en los Países Bajos sobre la asociación del país eslavo con la comunidad Europea.
Los medios de comunicación europeos también son un punto de atención de la fundación.
En tan solo uno de los documentos filtrados, se autoriza la financiación de 6 periódicos, 10 medios audiovisuales (TV y radio), 6 páginas web y unos 50 'líderes de opinión' en la redes sociales, centrados principalmente en cinco países —Alemania, Francia, España, Italia y Grecia—.
Entre ellos, Nicolás de Pedro, investigador principal del espacio postsoviético del Centro de Barcelona para las Relaciones Internacionales (CIDOB), cuyo nombre destaca en uno de los documentos por haber recibido $6.500 por elaborar un documento de algo más de 3.000 palabras.
Además, entre el año 2000 y el 2014, diferentes ONG y grupos políticos auspiciados por Soros participaron en toda la secuencia de las llamadas 'revoluciones de colores' que se produjeron en el espacio postsoviético, mediante las cuales, burlando el orden constitucional, llegaron al poder fuerzas abiertamente antirrusas y proestadounidenses, como en Georgia o Ucrania.
Respecto a esta última, en otro de los informes publicados, el autor subraya que había sido una labor bastante complicada convencer a algunos actores de la Unión Europea de que la 'revolución del Maidán' fue en realidad 'democrática' y el nuevo Gobierno de Kiev, 'legítimo'.
En particular, se destaca a emergentes movimientos del sur de Europa, como el Movimiento 5 Estrellas en Italia, Podemos en España y Syriza en Grecia, que no estarían de acuerdo con la versión oficial de los hechos.
Para combatir esta tendencia, se destinaron otros $750.000 a medios como The Guardian, Huffington Post o Internazionale, con el objetivo "de fomentar el debate y sembrar las dudas en grupos que tengan una percepción negativa sobre las transformaciones que se viven en Ucrania", "desacreditar la idea de que la independencia e integridad de Ucrania es una causa ideológica de la derecha" y "darle mayor representatividad a la voz de la 'Nueva Ucrania'".
La 'Nueva Ucrania'
En la Ucrania actual, las organizaciones de Soros tienen una representatividad considerable.
Se destinan cerca de medio millón de dólares anuales al patrocinio en ese país de medios antirrusos.
La suma puede no parecer considerable si no se tiene en cuenta que, después de la crisis y la depreciación de la moneda nacional, un ciudadano ucraniano medio recibe hoy día un salario cuya suma anual no supera los $2.000.
La filtración revela además detalles del viaje que Soros realizó a Ucrania en marzo de 2014, justo después del cambio de poder que se produjo en el país.
El multimillonario mantuvo entonces reuniones con los máximos dirigentes ucranianos, incluyendo al presidente interino Alexandr Turchínov, al primer ministro Arseni Yatseniuk y a otros dirigentes políticos como el actual presidente Petró Poroshenko.
Los encuentros no tuvieron un carácter oficial y, según la correspondencia revelada, por razones de seguridad se llevaron a cabo en el hotel donde Soros se había hospedado.
Según Knyazev, de haberse descubierto un encuentro similar por parte de algún líder europeo, este comportaría su dimisión.
Sin embargo, lamentablemente, en la política ucraniana los encuentros de este tipo son algo que se produce a menudo, afirma.
Rusia
Las actividades de organizaciones pertenecientes a George Soros fueron prohibidas en Rusia a finales de 2015, después de que la Fiscalía General encontrara que sus acciones contravenían el orden constitucional del país.
Sin embargo, diferentes ONG y medios rusos siguen recibiendo financiación de organizaciones asociadas a la Fundación, como las cadenas de televisión Dozhd y RBK, la radio Ekho Moskvy y el diario Novaya Gazeta.
Aunque, al hablar de cantidades, hay que decir que según los datos filtrados Soros valora la actividad de los periodistas rusos mucho más que la de los ucranianos.
Comentario: Más filtraciones del DCleaks:
https://es.sott.net/article/47748-Las-intenciones-inconfesables-de-la-filantropia-de-Soros