Según un artículo del portal News, la mayor parte de ese equipo incautado, que incluye vehículos de combate, tanques y helicópteros, fue suministrado por EE.UU.
Tras la retirada de las tropas estadounidenses de Irak en 2011, Washington ha ofrecido al Ejército iraquí apoyo logístico militar con el fin de ayudarles a combatir a los insurgentes.
Sin embargo, buena parte del armamento está actualmente en manos del enemigo, agrega el artículo.
En Internet ya circulan imágenes de los insurgentes con vehículos militares.
Muchos parecen estar en mal estado, lo cual sugiere que EE.UU. no hizo ningún tipo de seguimiento de los mismos tras la entrega, apunta el portal News.
No obstante, lo que resulta todavía más preocupante es que muchos miembros del EIIL saben cómo usar esas armas, dado que en el Ejército iraquí se han infiltrado durante mucho tiempo agentes dobles y militantes encubiertos y muchos podrían haber sacado provecho de la formación militar facilitada por EE.UU.