(ACAN-EFE). -El presidente de El Salvador, Mauricio Funes, aseguró hoy que el exgobernante Francisco Flores, prófugo por un caso de presunta corrupción, “va a terminar en la cárcel”, aunque admitió que todavía se desconoce dónde se encuentra.
Utilizando una frase con la que suele acompañar sus advertencias a sus opositores políticos, Funes sentenció: “les guste o no les guste, el expresidente Flores va a terminar en la cárcel, si lo llegan a agarrar”.
Funes también lamentó, en declaraciones a periodistas tras un acto oficial, que la Fiscalía General de la República (FGR) todavía no ordene allanamientos de lugares donde Flores pudiera estar en El Salvador.
Flores está acusado de la presunta apropiación de 15 millones de dólares de la ayuda de Taiwan a su Gobierno (1999-2004).
El mandatario admitió que Flores no ha sido localizado pese a la búsqueda de la Policía Nacional Civil y de la Policía Internacional (Interpol), desde que la jueza Marta Rosales, del Juzgado Primero de Paz de San Salvador, ordenó su captura el pasado 6 de mayo.
“No sabemos si está en el país o no; obviamente que, si no está en el país, si salió, si se encuentra en otro país, se especuló que pudiera ser Panamá, salió por vías ilegales”, aseveró.
Funes apuntó que si Flores “entró a Panamá” lo hizo “por vías ilegales o al menos por vías no regulares, puesto que no hay ninguna ficha migratoria que dé cuenta” de su viaje.
La supuesta presencia de Flores en Panamá, protegido por la expresidenta de ese país, Mireya Moscoso, ha sido denunciada por el presidente del Parlamento salvadoreño, Sigfrido Reyes, y el político opositor panameño Mitchell Doens.
“Estamos haciendo lo que nos corresponde” para localizar al expresidente; “seguiremos haciendo esfuerzos (…) por detectar su ubicación”, agregó Funes.
El gobernante justificó que el pasado día 13 el ministro de Justicia y Seguridad Pública, Ricardo Perdomo, haya dicho que era “cuestión de horas la ubicación física” de Flores.
“Tenemos algunas pistas y a eso se debió aquella declaración que en su momento dio el ministro Perdomo en el sentido que estábamos cerca” de localizar al exmandatario, expresó Funes. “Pero hasta el momento todavía no se le ha ubicado y, por lo tanto, mientras no se ubique no se le puede detener”, reconoció.
Empero, Funes reiteró que le “preocupa” que “la Fiscalía sigue sin dar las órdenes de allanamiento” de propiedades u otros sitios donde Flores pudiera estar o haber estado en El Salvador, ya que la Policía no puede ejecutarlas por su cuenta.
Esos allanamientos no se pueden hacer “sin la presencia del Ministerio Público porque se podría romper la cadena de custodia en caso se encuentre algo que incrimine al presidente Flores”, argumentó. “Nos llama la atención por qué la FGR no da esas órdenes (…), no las ha querido dar hasta el momento”, enfatizó Funes.
La Fiscalía acusó a Flores el 30 de abril de peculado y enriquecimiento ilícito por un total de 15 millones de dólares en ayuda de Taiwan a su Gobierno y por desobediencia por no comparecer de nuevo ante una comisión investigadora de la Asamblea Legislativa el 30 de enero pasado.
Tres días después de que el tribunal salvadoreño ordenara su captura, la Interpol incorporó a Flores en la lista de los más buscados.
