El emir de Qatar, Sheij Ahmed Tamim, ha reconocido que el gobierno sirio ha superado cualquier riesgo de derrocamiento, lo que demuestra el fracaso de todas las opciones militares.
“La participación de todos los grupos opuestos al gobierno sirio en la conferencia de Ginebra-2 sobre Siria es imperativa, puesto que la caída del estado sirio ya no es posible”, reconoció Sheij Ahmed Tamim.
“Washington, que es consiente del hecho de que no se puede hacer caer el gobierno sirio por la fuerza, ha cambiado su enfoque hacia este último”, añadió el emir de Qatar.
Mientras Arabia Saudí se obstina en sus errores en Siria y continúa enviando allí mercenarios y armando a los terroristas, ciertos gobiernos de la región y de fuera de ella han comprendido que la opción militar no conduce a ninguna parte y han decidido dirigir su atención hacia una solución política.
El gobierno de Qatar figura entre los gobiernos regionales que apoyaron más decididamente a los grupos terroristas en Siria desde el inicio de la crisis hasta la renuncia al poder (bajo presión de EEUU) del ex emir y padre del actual dirigente, Sheij Hamad.
La transferencia del poder de Sheij Hamad a su hijo, Sheij Tamim, fue el precio que el primero tuvo que pagar por el fracaso de su política en Siria.
Con el reconocimiento del fracaso de la opción militar, Sheij Tamim busca crear un tipo de consenso entre los opositores al gobierno sirio para que éstos acudan a la Conferencia de Ginebra-2 con el fin de resolver la crisis políticamente.
No está claro, sin embargo, si las declaraciones de Sheij Tamim significan que Qatar va a cortar su ayuda en armamento a los grupos armados en Siria.
AL MANAR