La realidad ante la que se encuentra la sociedad tras las revelaciones de Edward Snowden supera lo que el novelista británico George Orwell describe en su famosa anti-utopía '1984', sostiene el redactor Alan Rusbridger.
El mundo celosamente vigilado de la novela de George Orwell '1984' es una asociación difícil de soslayar tras las desclasificaciones de documentos sobre las actividades de los servicios secretos estadounidenses y europeos.
Orwell nunca habría podido imaginar algo tan completo como este concepto de vigilar a cada uno todo el tiempo
Como explicó Alan Rusbridger, redactor jefe del diario británico 'The Guardian' en una conferencia que ha dado este lunes en Nueva York, "Orwell nunca habría podido imaginar algo tan completo como este concepto de vigilar a cada uno todo el tiempo".
El periodista subrayó que, aunque por ahora no se trate del totalitarismo, la infraestructura creada podría ser peligrosa si cae en las manos inapropiadas.
"La habilidad de estas grandes agencias para mantener a nivel internacional a toda la población bajo algún tipo de vigilancia, así como su habilidad para usar la ingeniería y algoritmos para armar un sistema de monitoreo y vigilancia, es asombrosa", concluye Rusbridger.
Quien controla la información, controlará el futuro "Es un impacto muy importante sobre el equilibrio de varios derechos en la sociedad, sobre como se hacen los negocios, y sobre la seguridad de las personas y su rutina digital", subraye el redactor.
Los documentos desclasificados muestran que el espionaje de los servicios secretos como la estadounidense Agencia Nacional de Seguridad (NSA) o el británico Cuartel General de Comunicaciones del Gobierno (GCHQ) superaba todos los límites sin distinguir entre socios estratégicos y enemigos potenciales.
La red global de vigilancia contempla un amplio abanico de objetivos, desde geopolíticos hasta comerciales.
A pesar de las declaraciones del gobierno de Obama, que defiende este tipo de vigilancia alegando que ello contribuye a la seguridad nacional, el tema de espionaje ha indignado a varias naciones, hasta el punto de que ha sido llevado este martes a la Asamblea General de la ONU por la presidenta de Brasil, Dilma Ruseff.
"La habilidad de estas grandes agencias para mantener a nivel internacional a toda la población bajo algún tipo de vigilancia, así como su habilidad para usar la ingeniería y algoritmos para armar un sistema de monitoreo y vigilancia, es asombrosa", concluye Rusbridger.
Quien controla la información, controlará el futuro "Es un impacto muy importante sobre el equilibrio de varios derechos en la sociedad, sobre como se hacen los negocios, y sobre la seguridad de las personas y su rutina digital", subraye el redactor.
Los documentos desclasificados muestran que el espionaje de los servicios secretos como la estadounidense Agencia Nacional de Seguridad (NSA) o el británico Cuartel General de Comunicaciones del Gobierno (GCHQ) superaba todos los límites sin distinguir entre socios estratégicos y enemigos potenciales.
La red global de vigilancia contempla un amplio abanico de objetivos, desde geopolíticos hasta comerciales.
A pesar de las declaraciones del gobierno de Obama, que defiende este tipo de vigilancia alegando que ello contribuye a la seguridad nacional, el tema de espionaje ha indignado a varias naciones, hasta el punto de que ha sido llevado este martes a la Asamblea General de la ONU por la presidenta de Brasil, Dilma Ruseff.