ANDES – La Embajada de Estados Unidos de América en Ecuador negó la visa a cinco ecuatorianos afectados por la contaminación ambiental que dejó la transnacional Chevron en la provincia de Sucumbíos durante su operación petrolera entre 1964 – 1990.
Dicha decisión fue rechazada por el Gobierno Ecuatoriano, quien expresó inmediatamente su malestar al Gobierno de Estados Unidos de América por la falta de trámite de las visas a los ecuatorianos que tienen pasaporte especial otorgado por el Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana.
Los ciudadanos deben acudir este martes a la sede de Naciones Unidas para presentar su testimonio durante un evento especial que se realizará en Nueva York, en el marco de la 68 Asamblea General de la ONU.
Sin ninguna respuesta, la Embajada de Estados Unidos en Quito, devolvió los pasaportes especiales otorgados por el Gobierno ecuatoriano a los afectados por la contaminación, quienes con el pasaporte especial están protegidos por las normas del “Convenio de Sede” de la ONU, expuso la cancillería a través de un comunicado oficial.
“El Gobierno Nacional respetuoso del Derecho Internacional exige que todo país se comporte con la misma ecuanimidad y respeto a las normas vigentes y a la costumbre internacional, tal como lo hace Ecuador”, refiere el documento.
Chevron-Texaco, según ha sido probado en el juicio de Lago Agrio, a causado uno de los mayores desastres medioambientales de la historia.
La petrolera regó 18.000 millones de barriles de agua con petróleo, lo que para el presidente Rafael Correa es 85 veces más que el derrame de British Petroleum en el Golfo de México y 18 veces más que el desastre de Exxon Valdez en las costas de Alaska.
De acuerdo al fallo de la Corte de Sucumbíos, Chevrón debe pagar 19.000 millones de dólares por incumplimiento de la remediación ambiental.
Para no cumplir con lo dispuesto por la justicia ecuatoriana la petrolera implementa una campaña de desprestigio de más de 400 millones de dólares, de las cuales se han hecho eco medios nacionales e internacionales.
El pasado martes el mandatario socialista visitó el recinto La primavera, del cantón amazónico Shushufindi (norte), donde lanzó la campaña La Mano Sucia de Chevron, pues ante medios internacionales mostró la evidencia de la contaminación introduciendo su mano en una de las mil piscinas que supuestamente fueron reparadas y exhibió que el petróleo todavía está en la superficie.
El pasado martes el mandatario socialista visitó el recinto La primavera, del cantón amazónico Shushufindi (norte), donde lanzó la campaña La Mano Sucia de Chevron, pues ante medios internacionales mostró la evidencia de la contaminación introduciendo su mano en una de las mil piscinas que supuestamente fueron reparadas y exhibió que el petróleo todavía está en la superficie.
