IROEL SANCHEZ – “La radio de Miami tiene un micrófono abierto permanente” dice un poema de Miguel Barnet que agrega inmediatamente: “y es un tratado de lingüística escatológica: la palabra mierda, la palabra carajo, la palabra… se dicen a boca de jarro”
Y hay que imaginarse esa radio hace quince años, en los días del juicio que condenó allí a Cinco cubanos que buscaban información entre grupos extremistas para evitar actos terroristas contra su país. Hoy se sabe que el gobierno de Estados Unidos pagó onerosamente a periodistas de Miami para propiciar un clima de odio y amenazas, descrito por un tribunal de apelaciones como una “tormenta perfecta” que obligaría a repetir el proceso en un escenario distinto.
Pero quién sabe por qué razones por nosotros ignoradas el tribunal de apelaciones dio marcha atrás al recibir una reclamación del gobierno, no se ha repetido el juicio, y cuatro de estos hombres permanecen en prisión con largas condenas que llegan hasta dos cadenas perpetuas más quince años.
Sólo uno de ellos, René González, después de cumplir su sentencia hasta el último día y castigado además con tres años de “libertad supervisada” ha podido regresar a Cuba. La misma jueza que condenó a Los Cinco -como los conoce el mundo- no se ha pronunciado sobre las apelaciones extraordinarias o hábeas corpus presentadas por los cuatro que permanecen en prisión, ni se ha obligado al gobierno estadounidense a que entregue las pruebas que ha negado y que demostrarían la inocencia del que sufre la pena más prolongada.
Joan Lenard, la jueza en cuyas manos están los recursos de hábeas corpus, quizás tema que esos medios de Miami -manejados por la extrema derecha- la traten como a Janet Reno, la Fiscal General que se atrevió a devolver a Cuba al niño Elián González y que tuvo que pagar con su linchamiento mediático el valor de hacer justicia.
Pero es de suponer que el presidente Barack Obama -hombre educado y de buen gusto- no escuche la radio del Sur de La Florida, el tribunal que realmente juzgó y condenó por adelantado a Los Cinco, y ya es hora de que oiga a los Parlamentos, Premios Nobel, Jefes de Estado, intelectuales y luchadores sociales de todo el mundo que le han solicitado libere a estos hombres que salvaron muchas vidas de un pueblo que ha perdido miles de sus hijos víctimas del terrorismo organizado desde Miami. (Publicado en CubAhora)
Fuente: http://lapupilainsomne.wordpress.com/2013/08/15/escucha-obama-la-radio-de-miami/