ABI – La IX marcha de la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (Cidob) llegó el miércoles a la ciudad de La Paz con pocos habitantes del Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (Tipnis) en sus filas y con una masiva presencia de representantes de otros sectores, entre ellos políticos del opositor Movimiento Sin Miedo (MSM), ex militantes del Movimiento Al Socialismo (MAS) y activistas medioambientalistas.
Cerca a las 15h00 la marcha de la Cidob llegó a la sede de Gobierno e intentó ingresar por la fuerza la Plaza Murillo, centro del poder político de Bolivia, alentado por el ex viceministro de Tierras, Alejandro Almaraz, el secretario político del MSM, Edwin Herrera y asesores de la opositora Convergencia Nacional (CN), que instaron a los marchistas a romper el perímetro de seguridad.
Los integrantes de la marcha, que partió hace 56 días desde la ciudad amazónica de Trinidad con al menos 150 indígenas, engrosó sus filas con la participación de militantes políticos de oposición, entre ellos los legisladores de CN Centa Reck y German Antelo, el disidente del Movimiento Al Socialismo (MAS), Filemón Escobar y el ex dirigente campesino, Rafael Quispe.
Los marchistas provocaron actos de violencia en las calles circundantes a la Plaza de Armas, donde se alzan el Palacio de Gobierno, la Asamblea Legislativa Plurinacional y la Cancillería del Estado, y golpea a los policías con botellas de plástico, basura y piedras.
Por más de dos horas, los marchistas, con varios universitarios en sus filas, intentaron retirar los caballetes de metal ubicados en las cuatro esquinas de la Plaza Murillo, que impedían el paso a la turba, que insultó a los policías y les arrojó con monedas, en repudió al acuerdo que lograron los uniformados con el Gobierno de 100 bolivianos.
Posteriormente la marcha se dividió en dos grupos: el primero, siguió hasta la plaza San Francisco donde fueron recibidos por el Alcalde de La Paz, Luis Revilla, del opositor MSM, que fue acusado de financiar la marcha con fondos del municipio.
El segundo grupo se quedó en la esquina formada entre las calles Ingavi y Yanacocha para instalar una vigilia.
La CIDOB convocó a la IX marcha con la consigna de la protección de los territorios indígenas, la biodiversidad, el respeto a la Ley Corta de protección al TIPNIS y la derogatoria a la Ley de Consulta a los habitantes de ese parque nacional.
Los dirigentes de la CIDOB decidieron seguir con la movilización a pesar del anuncio del Ejecutivo de anular el contrato con la brasileña OAS para la construcción de la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos, decisión que paralizará por tiempo indefinido ese proyecto, demandado por otros sectores como una necesidad estratégica de integración.
Red central/civ ABI