La Radio del Sur /EFE- El empresario
nicaragüense Henry Fariña acusó este lunes al costarricense Alejandro
Jiménez de ser el responsable del atentado perpetrado en su contra el
pasado 9 de julio en Guatemala, durante el cual murió el trovador
argentino Facundo Cabral.
Henry Fariña explicó que Alejandro Jiménez le había amenazado de
muerte por negarse a vender los centros nocturnos conocidos como “Elite”
en Costa Rica y Nicaragua.
Fariña prestó su declaración como testigo del crimen de Cabral a
través de una videoconferencia ante el Juzgado Quinto de Primera
Instancia Penal.
En parte de sus declaraciones, el empresario de espectáculos explicó
que Jiménez, alias “Palidejo”, le había amenazado de muerte por negarse a
vender los centros nocturnos conocidos como “Elite” en Costa Rica y
Nicaragua.
Fariña comentó que su negativa le causó malestar a Jiménez, pero
anotó que no le dio importancia a las amenazas de muerte hasta que se
perpetró el atentado en Guatemala el pasado 9 de julio.
El empresario trasladaba en su vehículo a Cabral hacia el aeropuerto
internacional La Aurora cuando fueron tiroteados en un bulevar del sur
de la capital guatemalteca.
Cabral murió por varios impactos de bala dentro del vehículo, mientras que el nicaragüense resultó herido de gravedad.
Fariñas dijo que el atentado iba dirigido en su contra y no contra el
trovador argentino, al que había contratado para unos conciertos en
Guatemala.
Las fuerzas de seguridad han capturado hasta ahora a los
guatemaltecos Elkin Hernández, Wilfred Allan Stokes y Juan Hernández
Sánchez como responsables del asesinato de Cabral.
El supuesto autor intelectual del homicidio del cantautor argentino
ha sido identificado como el costarricense Alejandro Jiménez, alias “el
Palidejo”, quien se dedica al lavado de dinero del narcotráfico en su
país, según fuentes oficiales de Costa Rica.
Jiménez, quien no ha sido capturado, habría ordenado el asesinato de
Fariña como una venganza por una supuesta disputa interna en el grupo
criminal, integrado por al menos unas 20 personas.
Las declaraciones del empresario nicaragüense se produjeron por
videoconferencia por medidas de seguridad, dijo el juez Marco Antonio
Villeda.
El testimonio de Fariña se había previsto inicialmente para el pasado
9 de septiembre, pero la diligencia fue suspendida debido a una mala
notificación del Centro Administrativo de Gestión de los tribunales.