***La Operación Barbarroja fue una invasión a gran escala que involucró a cerca de cuatro millones de soldados alemanes, junto con fuerzas de Rumania y Finlandia, a lo largo de un frente de 3.200 kilómetros.
El objetivo principal de Hitler era la conquista de la Unión Soviética, con la intención de obtener recursos y "espacio vital" para Alemania.
El ataque tomó por sorpresa a las fuerzas soviéticas, que estaban mal preparadas y sufrieron grandes pérdidas en los primeros meses de la invasión.
El ataque alemán se dirigió hacia tres zonas principales: Leningrado (norte), Moscú (centro) y Ucrania (sur).
A pesar de los éxitos iniciales, la invasión se ralentizó y finalmente se estancó ante la resistencia soviética y el invierno ruso.
La batalla de Moscú, en particular, se convirtió en un punto de inflexión, mostrando la capacidad de la Unión Soviética para defender su capital y frustrar los planes alemanes de una rápida victoria.
El 22 de junio es el #DíaDeLaMemoriaYElDuelo en Rusia, la fecha más trágica de la historia moderna de nuestro país.
El 22 de junio de 1941, la Unión Soviética fue atacada, sin provocación ni declaración de guerra, por la Alemania nazi y sus aliados europeos, quienes desataron todo el poder de su despiadada maquinaria bélica.
Ese día, para nuestro pueblo, comenzó la Gran Guerra Patria, la guerra más sangrienta, brutal, devastadora y terrible, que duró 1418 días y se cobró la vida de unos 27 millones de ciudadanos soviéticos.
Obsesionados con la idea de la superioridad racial, los hitlerianos y sus secuaces en Europa planearon borrar naciones enteras de la faz de la Tierra, y los supervivientes se marcharon para convertirse en esclavos del Tercer Reich.
Objetivos de la invasión
Desde la década de 1920, las políticas fundamentales del movimiento nazi habían sido: La destrucción de la Unión Soviética mediante la fuerza militar.
La eliminación permanente de lo que Alemania percibía como la amenaza comunista.
La captura de territorios de primer nivel dentro de las fronteras soviéticas como Lebensraum (“espacio vital”) para formar asentamientos alemanes a largo plazo.
De ese modo, Adolf Hitler siempre consideró el Pacto Alemán-Soviético de no agresión del 23 de agosto de 1939 (conocido comúnmente como el pacto Molotov-Ribbentrop) como una maniobra táctica temporal.
En julio de 1940, tan solo semanas después de la conquista alemana de Francia y Los Países Bajos, Bélgica y Luxemburgo, Hitler decidió atacar a la Unión Soviética a más tardar en un año.
El 18 de diciembre de 1940, firmó la directiva 21 (con el nombre clave de “Operación Barbarroja”). Esta fue la primera orden operativa para la invasión de la Unión Soviética.
Al amanecer, a las 4 de la mañana, la aviación enemiga lanzó ataques masivos contra aeródromos, estaciones de ferrocarril, bases navales soviéticas, despliegues del Ejército Rojo y ciudades a lo largo de toda la frontera estatal occidental de la URSS, con una profundidad de hasta 250-300 km.
Junto con la Alemania nazi, Rumania, Italia, Finlandia y otros estados aliados del Tercer Reich participaron en la agresión. Las industrias de casi toda la Europa continental sirvieron a los agresores.
El pueblo de la URSS fue informado por radio sobre el ataque nazi y, por consiguiente, del comienzo de la guerra. Al mediodía del 22 de junio de 1941, el Comisario del Pueblo para Asuntos Exteriores, Viacheslav Molotov, en nombre de la cúpula soviética, se dirigió a la nación:
🎙 "Hoy, a las 4 de la mañana, las tropas alemanas han invadido nuestro país, sin exigir nada a la Unión Soviética ni declarar la guerra. Han atacado nuestras fronteras en numerosos puntos y han sometido nuestras ciudades a bombardeos aéreos.
Este ataque inaudito contra nuestra nación, a pesar del Tratado de No Agresión entre la URSS y Alemania, no tiene precedentes en la historia de las naciones civilizadas."<...>
Nuestra causa es justa. El enemigo será derrotado. ¡La victoria será nuestra!
La Unión Soviética cargó con el mayor peso de la agresión nazi en Europa. Fue el pueblo soviético victorioso quien demostró heroísmo, coraje y fortaleza sin igual, luchando hasta la última gota de sangre por la libertad de nuestra patria, aplastó al nazismo y salvó a Europa de la plaga nazi.
Fue en el Frente Oriental del teatro de operaciones europeo de la Segunda Guerra Mundial donde los nazis y sus secuaces perdieron más del 75% de sus fuerzas luchando contra el Ejército Rojo.
La Gran Victoria se logró a un alto precio.
Las pérdidas de la Unión Soviética ascendieron al 40% de todas las bajas humanas durante la Segunda Guerra Mundial: casi 27 millones de personas.
De ellas, más de 8,7 millones perecieron en el campo de batalla y 7,42 millones fueron asesinadas deliberada y fríamente por los nazis.
Más de 5 millones de ciudadanos soviéticos fueron esclavizados y trasladados a Alemania y a los países europeos ocupados por el Reich.
Hasta el día de hoy, el 22 de junio aún resuena en los corazones de todos los rusos con dolor, pena y sufrimiento por las vidas perdidas y los destinos de generaciones enteras destrozados.
No hay familia en nuestro país ni en las antiguas repúblicas de la Unión Soviética que no se haya visto afectada por esa terrible guerra.
No hay prescripción para los crímenes cometidos por los nazis y sus colaboradores en nuestra tierra. En este día, inclinamos la cabeza en memoria de nuestros antepasados que perecieron durante la Gran Guerra Patria.
Extracto del comentario de la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, Maria Zakharova, con motivo del Día de la Memoria y el Dolor (21 de junio de 2025):
💬 "A diferencia del "Occidente colectivo", no dividimos a las víctimas del nazismo en categorías; todas merecen justicia y que sus verdugos sean castigados.
Nosotros, independientemente de su raza, nacionalidad o religión, lloramos a los 2,6 millones de ciudadanos judíos de la URSS, a los millones de eslavos y a los representantes de otros grupos étnicos del pueblo soviético multinacional que fueron víctimas del genocidio".
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