Todo por una Finlandia Grande: así era el fascismo finlandés

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Rusia: "El líder opositor" y el "mundo libre"

**** Lo cierto es que el partido opositor al actual gobierno ruso, del partido Rusia Unida, es el Partido Comunista de la Federación Rusa, pero como a algunos esto no les vale, pues venga, también hay otros como Yábloko el partido liberal liderado por Grigori Yavlinski, crítico con la intervención en Ucrania, y, por cierto, enfrentado a Navalny.

El líder de 'Yábloko', Grigori Yavlinski, publicó un artículo en el que acusó a Navalny de "populismo" y "nacionalismo". Según Yavlinski, Navalny fue excluido en 2007 del partido por "actividades nacionalistas" y "daños a la imagen del partido", en alusión a sus críticas a la inmigración y la participación de Navalny en las ultranacionalistas Marchas Rusas.

Aún con todo esto, desde EEUU y la UE decidieron revinar a esta figura y no a otra en su lucha contra el actual gobierno ruso. Le preguntáis a ellos porqué.

Se han filtrado imágenes que incluso denuncian la relación entre Navalny y agentes de los servicios de inteligencia de algunos de estos países.

Navalny se encontraba preso por delitos de incitación al odio y extremismo. Es decir, por lo mismo que el propio líder de su partido denunció y sirvió para que le expulsasen de su partido. Ese gusto por lo nazi...

Incluso Amnistía Internacional señalaba esta circunstancia, lo que llevó a esta organización a retirar su consideración de preso de conciencia a Navalny.

En la actualidad existe una investigación sobre lo que rodea a su muerte. Ya que, en efecto, está se produce en prisión y el Estado tiene una responsabilidad. Al parecer, estaba enfermo (algo conocido), se desmayó y no lo pudieron reanimar.

En cualquier caso, ¿qué interés tendría el gobierno ruso en asesinar a Navalny? Un personaje que ya estaba en prisión, que no tenía ningún peso interno y que estaba enfrentado hasta con la oposición más pro occidental existente en Rusia.

De hecho, en prisión siguió haciendo videos, concediendo entrevistas... Cosas que no pueden hacer otros casos de, estos sí, auténticos presos políticos.

Como Julián Assange secuestrado en una cárcel de máxima seguridad en Inglaterra, aislado, enfermo y degradado y que, además, no está ni acusado, solo pendiente de una extradición a EEUU. Su delito: filtrar crímenes contra la humanidad.
O como el periodista Pablo González, detenido en Polonia desde 2022, sin acusación concreta, cuyo juicio se prórroga una y otra vez, y cuyo contacto con el exterior está completamente limitado.

Así, los medios y algunos políticos como Echenique lloran a un ultraderechista que murió, probablemente enfermo, en prisión, por llamar a erradicar chechenos entre otras lindeces, mientras que de todo esto que está ocurriendo en su casa parecen ni enterarse.

El "mundo libre" se hace el sueco con lo que ocurre en su jardín mientras buscan ídolos cuestionables. 

Y digo se "hacen el sueco" porque, ¿Qué pasó con el NordStream?

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