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Los caminos de la oposición nicaragüense de cara a Noviembre 2021


¿Qué pretende la derecha nicaragüense ante la contundente realidad de la Reforma Electoral y la elección de nuevos magistrados del CSE, aprobados por la Asamblea Nacional?


Deberían, en primer lugar, aprender a diferenciar la realidad de los sueños, lo posible de lo imposible y aceptar lo que realmente son: Un manojo de siglas en constante movimiento contradictorio, sin músculo popular para imponer una agenda de reforma electoral a su medida, ni siquiera para "presionar" al gobierno a que se siente con ellos a negociar. 

Existen únicamente por el oxigeno financiero, político y mediático que les suministran desde el exterior sus patrocinadores. Pero a lo interno son inexistentes como partido político o alianza. Y el tiempo se les termina.

Por otro lado, causa estupefacción escuchar hablar a sus “politólogos” con diversas narrativas queriendo impresionar a la población de que tienen autonomía para decidir el camino que van a emprender en esta coyuntura, cuando todo mundo sabe que ellos no respiran por si mismos.

 La reforma se hizo con los partidos constituidos legalmente, en consulta con diversos sectores, pese a lo que digan los europeos, pese a lo que digan los gringos y pese a lo que diga la OEA. Esto es un asunto entre nicaragüenses.

Ahora, con el calendario electoral publicado, se encuentran en una encrucijada que los obligará a tomar un camino definitorio, ya que, tendrán que registrar al 12 de mayo la Constitución de alianzas de partidos políticos, o nuevos partidos, con todo lo que implica en términos de organización de juntas directivas nacionales, departamentales, municipales, etc. 

Esto implica para ellos cruzar el "paso del Rubicón" con las aguas revueltas en una ciénaga donde están empantanados.

Ante las recientes reformas electorales, la elección de nuevos magistrados del Poder Electoral y el Calendario electoral: ¿Cuáles son los posibles escenarios por los que puede transitar la oposición fragmentada en la UNAB y la AC?

Opciones de escenarios:

1. El laberinto en que se encuentran sumergidos, el mar de contradicciones causadas por razones de desconfianza, recelos políticos por el liderazgo, por el control de los recursos que les envían desde el exterior, por posiciones de clase (una oligarquía financiera y de “casta” social que no renuncia a jugar un rol protagónico) y por la ineptitud de resolver sus conflictos internos en 3 años, se enfrentan ahora a un calendario electoral con fechas concretas que los hace aterrizar a la dura realidad, sin ambages, sin cortapisas; urden ahora narrativas débiles cuestionando al Rector Electoral, a la estrategia del partido de gobierno, a las “trampas de la dictadura”, precisamente para esconder su incapacidad política de constituir alianza electoral para este 12 de mayo.

2. Sus principales críticos son ellos mismos, sus “expertos políticos” revelan la falta de estrategia, los intereses personales y de grupo, la falta de músculo en las calles; la pasada de cuenta a Brooklyn Rivera de Yátama, el pleito intestino por las candidaturas a presidente, vicepresidente y diputados. 

Y en el caso que salga electo un candidato, -a través de un mecanismo mágico que sólo ellos conocen- se pregunta uno de sus propios críticos: ¿A quién van a representar? ¿A qué alianza, a qué partido, en qué casilla?

Si se deciden a participar en el proceso electoral, como parece ser, se perfilan únicamente las casillas del PRD y del CxL sobre las cuales se podrían montar estas agrupaciones. 

Y aunque estos partidos han ofrecido sus casillas a la posibilidad de una alianza, esto implicaría un reordenamiento interno de esos partidos, a la vez que una mayor cuota de poder para su dirigencia partidaria, en detrimento de otros grupos que tienen otro tipo de identidad y perspectiva. 

Este proceso presenta todavía sus escollos, sobre todo con CxL que cuenta con una personalidad y estructura política más fuerte que el PRD. 

No debemos de olvidar que en todo este proceso de conflicto interno de la oposición por el poder político está presente la embajada yankee, que en algún momento van apretar la tuerca y torcer el brazo para indicar el camino que van a seguir.

3. La tercer opción es autoexcluirse de la contienda electoral. Y para ello han venido enarbolando una campaña mediática dentro y fuera del país para desacreditar las reformas electorales, la calidad de los nuevos magistrados electos, y ahora también critican el recién publicado calendario electoral.

En las reformas que ellos propusieron a la Comisión Especial de la Asamblea Nacional, a través de Yátama, sobresalen entre otras consideraciones de orden técnico (incluidas en su mayoría por la Reforma aprobada por la AN) dos artículos que parecen ser los que más les duele a esta oposición.

 A saber, la Ley de Regulación de Agentes Extranjeros y la Ley de Defensa de los Derechos del Pueblo… que se relacionan con inhibiciones establecidas en febrero 1995, mediante la ley 192 de reforma parcial a la Constitución en la que prohíbe candidaturas por motivos expuestos en el artículo 147, inciso d.

Tienen una gran preocupación por el tema del financiamiento desde el exterior, ya que deben transparentarlo, informar el para qué está destinado. Su otra queja es la del control de la Policía, los permisos de movilización política y la normativa a que está sujeta aún en tiempos electorales. 

Ahí se nota mala fe de parte de ellos, ya que este es un mecanismo que se utiliza en otros países para normar y velar por la seguridad y protección de las fuerzas políticas participantes, evitando anarquía y vandalismo.

En consecuencia, si no hay “traje a la medida” en su propuesta de reformas, llamarán a la abstención electoral, pero esta vez con presión callejera, tratando de crear un clímax de violencia, atentados, contratando mercenarios foráneos y lo peor del lumpenado nicaragüense. 

Esto lo irán gradualmente ejecutando con mayor intensidad al acercarse la fecha electoral.

En el caso de presentarse a las elecciones, en el laberinto kafkiano en que se encuentran, remando contra el tiempo, presionados por sus patrocinadores externos y por algunos jerarcas de la iglesia católica, ante una derrota esperada, gritarán a una sola voz la canción del fraude e intentarán tomarse las calles y el poder violentamente. 

Desde ya acuden a la derecha fascista europea, al Departamento de Estado, al impresentable de Almagro en la OEA, rogando por sanciones al país.

• * Reglas del juego electoral*

En el espectro de la oposición hay voces moderadas que coinciden en que las reglas existentes son válidas y aceptables. No tanto como esta fracción de la oposición quisiera porque ellos no determinan la correlación de fuerzas. 

Sin embargo, está asegurada la participación amplia de diferentes posiciones políticas, un escenario plural en que el pueblo decidirá democráticamente hacia dónde depositará su voto sin coerción ninguna.

Porque el pueblo nicaragüense es sabio para diferenciar y distinguir la fuerza política que representa genuinamente sus verdaderos intereses.

Danilo José Urtecho

Viernes 7 de mayo 2021.

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