'Polvo letal, hecho en EEUU: las armas de uranio contaminan el mundo' es el título del nuevo libro de Frieder Wagner. En sus páginas, el autor detalla cómo EEUU ha venido contaminando vastos territorios del planeta con sus municiones de uranio empobrecido y cómo élites políticas y militares manipulan los medios.
Sputnik ha tenido la oportunidad de conversar con el documentalista, para acercarles a sus lectores los detalles de su nueva obra.
— Señor Wagner, su libro se centra en las bombas con uranio empobrecido. ¿Qué tiene especialmente de peligroso este tipo de proyectiles?
La munición de uranio se produce de los residuos de la industria atómica. Si, por ejemplo, usted se dispone a producir una tonelada de combustible de uranio para las centrales nucleares, obtendrá unas ocho toneladas de uranio empobrecido.
Es una fuente de radiación alfa, radiactiva y, además, extremadamente contaminante. Requiere ser almacenado en algún lugar, y eso no resulta muy barato.
— ¿Cómo es posible utilizarlo como un arma?
— Hace unos 30-40 años, los ingenieros militares se percataron que el uranio es casi el doble de pesado que el plomo. Si haces de ese uranio empobrecido un proyectil y le das una correspondiente aceleración, atravesaría el blindaje de un tanque en una fracción de segundo, así como muros de concreto o el cemento.
Esto, por supuesto, fue un descubrimiento importante. Además, al penetrar la armadura del tanque, se produce mucho polvo, que se incendia a una temperatura de 3.000 a 5.000 grados Celsius, incinerando a la tripulación del tanque.
— Pero el verdadero problema está en lo que sucede después del uso de estas municiones, ¿verdad?
— Exacto. El uranio empobrecido que, como ya he dicho, es una fuente de radiación alfa se quema, al quemarse forman nanopartículas que son 100 veces más pequeñas que los glóbulos rojos de la sangre.
De esta manera se crea, diría, una especie de gas metálico que la gente puede inhalar, que contamina el medioambiente y puede ser transportada por el viento, a cualquier parte.
Las personas que lo respiren tienen mayor riesgo de padecer de cáncer. Estas nanopartículas, al penetrar en el cuerpo de una mujer embarazada, superan incluso la barrera que protege al bebé y afectan su desarrollo. Pueden también penetrar directamente al cerebro y llegar a cualquier órgano a través del torrente sanguíneo.
Todo lo que vuela alrededor de la Tierra, tarde o temprano se asienta y, por supuesto, infecta, en particular, el agua potable.
— ¿En qué conflictos se han usado proyectiles con uranio empobrecido?
— Fue utilizado de manera activa durante la guerra de 1991 en Irak. Los militares reconocieron que su volumen total alcanzó las 320 toneladas.
Luego, en el curso de la segunda guerra en Irak, en 2003. Entonces su volumen alcanzó ya las 2.000 toneladas. También puede mencionar la guerra en Kosovo, en Yugoslavia, en Bosnia en 1995, durante la guerra en Kosovo en 1995 y después de 2001 en Afganistán, donde todavía se sigue usando.
— El título de su libro afirma "hecho en EEUU". ¿Este tipo de armas es usado solo por EEUU?
— Estas armas fueron desarrolladas en varios países de manera simultánea. En Alemania, también trabajaron en ello, como, por supuesto, en Rusia. Sin embargo, de manera masiva y en una escala tan grande han sido utilizadas solo por EEUU.
No obstante, ellos no prestaron mucha atención a los posibles efectos secundarios, como lo fue, de hecho, en el momento del primer uso de las bombas atómicas. Por eso llamé al libro 'Polvo letal, hecho en EEUU'.
— ¿Cómo pudo demostrar el uso de este tipo de municiones?
— Los serbios nos mostraron los lugares donde se utilizaron.
En Irak hablamos con los habitantes del lugar. Viajamos por los lugares de grandes batallas de tanques. Ahí recogimos muestras del suelo y del polvo dentro de los tanques dañados.
Al observar un tanque, se puede decir con seguridad si fue impactado con un proyectil convencional o uno con uranio empobrecido. Las municiones con uranio dejan un polvo que incinera todo alrededor del lugar de perforación.
En todas las muestras del suelo encontrábamos uranio empobrecido, así como uranio-236, aún más radiactivo y contaminante. En la naturaleza es imposible de encontrar, se obtiene solo con la producción de combustible para las centrales atómicas.
Todo esto nos permite decir con certeza que EEUU y sus aliados utilizan bombas de uranio.
— Su libro es una recopilación de las cintas documentales 'Los médicos y los niños irradiados de Basra' (2004) y 'Polvo letal' (2007). ¿Qué pudo ver mientras trabajaba en ellas?
Aquello fue terrible y sus escenas aún me persiguen en los sueños. Son niños con deformidades que vimos en orfanatos en Basra o Bagdad.
Algunos de ellos tenían tales deformidades que casi nada humano se podía ver en ellos. Hay niños nacidos sin cabeza o nariz, ya sea con un ojo o sin ojos, con órganos internos que crecen en una especie de 'bolsa' fuera del cuerpo. Tales criaturas pueden vivir solo unas pocas horas, experimentando un dolor terrible, para luego morir.
— El documental 'Polvo letal' acompaña el libro, pero no se puede ver en la televisión. ¿El canal WDR no ha hecho más encargos? ¿A qué se debe?
— Yo se lo he presentado a WDR, así como al canal ZDF, pero mis propuestas fueron negadas. Entonces hablé con un redactor de WDR, con el cual siempre hice buenos trabajos y tenía buenas relaciones, porque siempre le ayudaba a tener una audiencia dos y tres veces mayor de lo normal. Le pregunté qué pasaba. Y él pensó un poco y me dijo:
"Sí, Frieder, alguien tiene que decírtelo. En WDR creen que ahora es complicado trabajar contigo. Pero lo más importante es que los temas que propones también son complicados. No te puedo decir nada más".
Entonces lo entendí todo. Eso sucedió en el 2005.
— ¿Alguna víctima en Kosovo o Irak ha intentado acudir a los tribunales?
— En Kosovo e Irak hasta ahora no ha habido ningún intento. En estos momentos es Kosovo todo un grupo de abogados trabaja sobre una querella contra la OTAN, porque incluso después de la guerra las personas siguen sufriendo heridas, de enfermedades e incluso mueren.
La incidencia de todo tipo de males relacionados incrementa un 20-30% cada año y sigue en aumento. Así que habrá al menos un intento de poner una demanda.
De los 2.000 soldados italianos desplegados en Kosovo e Irak, 109 sufrieron de cáncer y fallecieron. Eso está probado.
Los familiares de 16 de esos soldados fueron a los tribunales y ganaron el caso. Los jueces sentenciaron que el Gobierno o el Ministerio de Defensa debía pagarles una compensación de entre 200.000 y 1,4 millones de euros, dependiendo del caso.
El Ministerio de Defensa alemán niega cualquier relación. No obstante, hemos encontrado que de los 100.000 soldados que han sido desplegados en Afganistán, al menos el 30% muestra algún signo de contaminación nuclear.
Los que se casen y tengan hijos corren el peligro de que sus hijos sufran de malformaciones.
Y así en varias generaciones, hacia los hijos y nietos de sus hijos.
https://mundo.sputniknews.com/entrevistas/201904021086456021-eeuu-contamina-el-mundo-con-polvo-letal/?fbclid=IwAR3z1AQI-DfYWdFzUYVcpGMGa7dvxcej8mP07AMeGUyzneuqQhBghE-fTk0