El 4 de noviembre, las tropas jordanas dispararon y mataron a tres sicarios de las fuerzas especiales estadounidenses que fueron reconocidos en ese momento como "entrenadores militares". Las tropas fueron asesinadas en un puesto de control en la Base Aérea de al-Jafr, y los esbirros jordanos dijeron que no se detuvieron como se suponía.
La situación parece mucho más complicada ahora, con oficiales que admiten que las tropas estadounidenses muertas en el incidente estaban trabajando para la CIA en un programa de entrenamiento de "rebeldes moderados".
Jordania sigue insistiendo en que fue un simple tiroteo de punto de control que salió mal, una de esas cosas que suceden en los puestos de control.
En lugar de afirmar que las tropas estadounidenses no se detuvieron, ahora afirman que una de sus armas se disparó por error, y las tropas jordanas les mataron debido a los altos niveles de seguridad.
Sin embargo, los oficiales estadounidenses no están tan seguros, el FBI ha iniciado una investigación y varios funcionarios dijeron que creen que el incidente fue un acto de terrorismo y no un simple malentendido.
La CIA se ha negado a comentar su vínculo con los soldados.
Se dice que ha sido el incidente más mortal que involucra a un equipo de la CIA desde diciembre de 2009, cuando siete agentes fueron asesinados en un ataque suicida en el campamento Chapman en Afganistán.
El atacante en ese caso también estaba trabajando para el gobierno jordano, convirtiéndose en un "agente triple" después de ser enviado a infiltrarse en Al Qaeda.
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Para saber más
http://tarcoteca.blogspot.com/2016/11/guerra-sucia-los-3-soldados.html