A mediados de agosto de 2014 Red Roja entregó 5.300 euros recaudados para apoyar la Resistencia del Pueblo Palestino ante la más brutal agresión neo-colonial sionista que ha conocido la torturada historia de este pueblo.
Este dinero ha sido entregado a la persona que es, probablemente, el mayor símbolo de la Resistencia y la Diagnidad Palestina: la luchadora Leila Khaled, militante del Frente Popular para la Liberación de Palestina.
Celebramos con todas nuestras fuerzas la indudable victoria militar palestina sobre Israel, que al igual que la de Hezbollah en 2006, auguran el principio del fin de la dominación sionista en la región.
Al tiempo, recordamos que la masacre del pueblo palestino, que ha resistido como una sola persona las riadas de dolor, de destrucción y de muerte que el Estado genocida de Israel ha descargado, sigue necesitando de toda nuestra solidaridad.
Breve semblanza de Leila Khaled
Leyla nació en Haifa en 1944. Padeció en su infancia la criminal limpieza étnica con la que los terroristas sionistas de La Hagana, Irgun y Stern asolaron la zona costera entre Jaffa y Haifa, donde su padre fue asesinado.
El historiador judío antisionista Ilan Pappé en su documentado libro “La limpieza étnica de Palestina”, imprescindible para conocer los orígenes del proyecto sionista de expulsión de los palestinos de sus tierras, muestra en toda su infinita crueldad la forma de actuar de los sionistas cuando reproduce del diario del 1/1/1948 de Ben Gurión, primer presidente de Israel, su concepción de la práctica del terror:
“Existe ahora la necesidad de una reacción fuerte y brutal. Si acusamos a una familia, necesitamos dañarla sin piedad, lo que incluye a sus mujeres y niños.
De otro modo, no se tratará de una reacción eficaz. Durante la operación no hay necesidad de distinguir entre culpables y no culpables”.
Esta filosofía criminal del sionismo se ha extendido hasta nuestros días, la Gaza asediada y masacrada ahora es el último eslabón de la larga cadena de crímenes sionistas contra el pueblo palestino. Por primera vez la lucha armada ha conseguido una gran victoria militar y unos acuerdos que jamás alcanzaron en mesas de negociación, con poderosos "patrocinadores".
Fue en 1969 cuando algunas de nosotras conocimos el rostro bello, sereno y decidido de la luchadora Leila Khaled, cuya fotografía se ha convertido ya en un icono de la Resistencia. En agosto de ese año los medios de todo el mundo difundieron la noticia del secuestro por un grupo de luchadores palestinos, y del que Leila formaba parte, de un aviónde la TWA que volaba de Roma a Atenas y que fue desviado a Damasco para exigir la liberación de presos palestinos en las cárceles sionistas.
Se asegura que exigió que el avión sobrevolara su ciudad natal Haifa, a donde no ha podido regresar desde que fue expulsada por el terror sionista.
Esta “ Leila la dinamitera palestina”, como, la también nuestra, Rosario, ha sido un ejemplo de honestidad, valentía y generosidad en la lucha por sus ideales de liberación de su pueblo sojuzgado.
A esta resistente a la barbarie nazi-sionista tuvimos el honor de entregar la generosa aportación recaudada para apoyar a la resistencia en Gaza.