Salen a luz pública los detalles de cómo explotan a los nicaragüenses
Grupo de agentes hacía hasta diez mil dólares semanales
San José. Un juez dejó libres con medidas alternas a cinco policías de la Fuerza Pública, detenidos el sábado pasado como sospechosos de conformar una red dedicada al tráfico ilegal de personas.
El juez dictó a los sospechosos medidas cautelares como no salir del país y firmar cada mes.
Las otras once personas detenidas por este mismo caso pasarán cuatro meses en prisión preventiva.
Todos ellos fueron detenidos el sábado en 18 allanamientos tras una investigación del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Liberia, por el supuesto delito de trata de personas.
Los 47 indocumentados detenidos localizados en una casa de Liberia ya fueron enviados a su país, Nicaragua.
Bandas Talibanes y Catanos
Diario Extra
San José. Un grupo bastante organizado que desde hace cuatro años se dedicaba a pasar nicaragüenses de manera ilegal a nuestro país fue desarticulado en una serie de allanamientos por los agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ y el Ministerio Público.
Según las autoridades, esta banda llamada Los Talibanes bajaba a los migrantes en la línea fronteriza y los obligaba a caminar 500 metros aproximadamente. Tras cortar alambres de púas llegaban a unos ranchos ubicados en suelo nacional, donde los escondía al menos dos días en condiciones infrahumanas.
Posteriormente empezaba a sacarlos del refugio -al parecer propiedad de unos hombres conocidos como Los Catanos- y en 16 vehículos livianos con la suspensión modificada y vidrios polarizados metían al menos 10 nicas y los transportaba hasta un punto determinado.
La acción policial se llevó a cabo este fin de semana en el cordón fronterizo con Nicaragua, La Cruz y Liberia, en Guanacaste, y San José centro, donde se capturó a 5 oficiales de la Fuerza Pública, 10 sospechosos de liderar la banda y 67 migrantes que fueron interrogados y deportados a su país natal.
Incluso se tiene conocimiento que los líderes de la banda les cobraban ¢2 mil de peaje a niños, ancianos y embarazadas que estaban de manera ilegal y al parecer les prometían llegar hasta la capital.
Gerald Campos, subdirector del OIJ, manifestó que un conductor de bus de placas ticas era avisado dónde tenía que recoger al grupo de ilegales.
“El chofer de una empresa de buses que se dedicaba también a dejar encomiendas era avisado dónde tenía que hacer una parada no establecida y subía tanto a legales como ilegales.
Los dejaba en un hotel capitalino muy cerca de la terminal del bus con matrícula costarricense, inclusive le cobraban $200 a cada uno por viaje”, explicó.
Celso Gamboa, viceministro de Seguridad, aseguró que seguirán atacando la corrupción dentro de la función pública. “Celebramos la detención de estas personas que, disfrazadas de oficiales de la Fuerza Pública, colaboraban con una organización delictiva.
Son unos traidores de la patria.
Seguiremos prestando colaboración con el OIJ y la fiscalía. No serán los últimos en ser detenidos, por lo que quitaremos a los corruptos que deciden cambiar de bando”, sentenció.
Gamboa agregó que los cinco oficiales involucrados son rasos y no tenían puesta la camiseta de la Fuerza Pública, además no descarta que personas de otras nacionalidades estén vinculadas en el ilícito negocio.
Los policías detenidos son de apellidos Araya, Ávila, Parrales, Sandino y Espinoza, mientras que el resto de la legión se apellida Martínez, Obando, Mairena, Díaz, Núñez, Corea (mujer) y Cepeda, quien fue condenado hace un mes a 8 años de cárcel por un delito similar. Además de los nicas Brais, Ávila y Espinoza.
Llenan cuarto de nicas
Las autoridades judiciales encontraron en el barrio Jícaro, en La Cruz, una vivienda donde estaban 47 nicaragüenses metidos en un cuarto, a la espera de ser sacados y llevados en los carros hasta el punto que habían pactado.
Al parecer los extranjeros estaban recién llegados a Tiquicia y se investiga si a algunas mujeres embarazadas que daban a luz ahí mismo les quitaban los bebés para venderlos en Nicaragua a supuestas bandas dedicadas al tráfico de órganos.
Además se conoció que pasaban horas sin comer ni tomar líquido y cuando les tocaba caminar lo hacían bajo el sol y los aguaceros que caen en la Zona Norte, sin embargo lo hacían por la necesidad de llegar a nuestro país en busca de trabajo.
Diario Extra capta negocio
La cámara del diario de Costa Rica, horas antes de ser detenidos captó a algunos de los taxistas piratas que montaban en media carretera a los migrantes, incluso algunos llevaban niños.
Mientras que en otro sector fronterizo las familias de nicaragüenses cargadas de bolsos y con menores caminaban por potreros y bajo el inclemente sol, sorteando el puesto fronterizo para no ser detectados por la policía.
Algunos de Los Talibanes nos aseguraron que el negocio es muy lucrativo y todo está hablado para que siga funcionando.
“Sabíamos dónde parquearnos para montar a los clientes, los que llegaban eran los que teníamos que transportar, iban con sus maletas, por lo que tuvimos que arreglar los carros porque estaban sufriendo mucho.