El profesor de religión escocés David McNally ha sido apartado de la docencia tras defender en el instituto donde impartía clase la labor de asesinar "a judíos, gais y minusválidos" llevada a cabo por Hitler en los campos de concentración.
"Hitler no era tan malo.
Mató a los judíos, a los gais y a los minusválidos", afirmó McNally durante una clase que impartía a adolescentes en la Academia Kilwinning, en el condado escocés de Ayrshire, según recoge el diario británico 'Daily Record'.
El Consejo General de Docencia de Escocia ha decidido inhabilitar a McNally para ejercer la docencia, argumentando que "no es apto" para la enseñanza.
Siendo aparentemente el más grave, este no fue el único comentario polémico que McNally hizo delante de sus estudiantes el 1 de noviembre del año pasado.
El Consejo General de Docencia de Escocia ha decidido inhabilitar a McNally para ejercer la docencia, argumentando que "no es apto" para la enseñanza.
Siendo aparentemente el más grave, este no fue el único comentario polémico que McNally hizo delante de sus estudiantes el 1 de noviembre del año pasado.
De hecho, no paró de hacer afirmaciones semejantes: le preguntó a uno de los estudiantes si había mantenido relaciones sexuales durante el fin de semana y afirmó que habría preferido trabajar como funcionario de prisiones o ser un corruptor de menores antes que profesor.
Y la lista de declaraciones criticadas por alumnos y padres que hizo aquel día continúa. Algunos adolescentes señalaron que el maestro de religión dijo que le encantaba su teléfono móvil porque podía usarlo para ver pornografía.
"Trabajo a media jornada en la casa de un niño en la que me han enseñado a fustigar con una toalla mojada sin dejar marcas", fue otro de los comentarios que hizo.
Por su parte, la defensa de McNally no parece tener las cosas muy claras, ya que reconoció que el profesor fue autor de estas polémicas afirmaciones, pero alegando como justificación que las hizo "en sentido general" y en el trascurso de un día que fue "particularmente malo" para el docente.
Y la lista de declaraciones criticadas por alumnos y padres que hizo aquel día continúa. Algunos adolescentes señalaron que el maestro de religión dijo que le encantaba su teléfono móvil porque podía usarlo para ver pornografía.
"Trabajo a media jornada en la casa de un niño en la que me han enseñado a fustigar con una toalla mojada sin dejar marcas", fue otro de los comentarios que hizo.
Por su parte, la defensa de McNally no parece tener las cosas muy claras, ya que reconoció que el profesor fue autor de estas polémicas afirmaciones, pero alegando como justificación que las hizo "en sentido general" y en el trascurso de un día que fue "particularmente malo" para el docente.