-El portavoz del Comité de Industrias y Minas de la Asamblea Consultiva Islámica de Irán (Mayles), Ruholá Abaspur, anunció que Francia es el principal perjudicado por su apoyo a las sanciones impuestas por EE.UU. a Irán.
Abaspur reiteró que Francia, al sancionar la industria automovilística de Irán, no solo ha perdido el mercado del país persa, sino que también se ha quedado sin los beneficios de los mercados de otros países relacionados con Irán.
Por su parte, los directivos del sector automotriz de Francia han protestado por esta decisión de sus políticos, ya que les ha obligado a soportar una gran pérdida en este campo.
El portavoz de este Comité parlamentario, recordando que las sanciones no han tenido gran efecto sobre la industria automovilística iraní, aseguró que el tema de las sanciones contra Teherán no es nada nuevo y, por esa misma razón, no ha tenido gran repercusión sobre la economía del país.
El pasado febrero, esta marca gala decidió suspender la venta de unidades despiezadas a Irán bajo la presión de las sanciones unilaterales e ilegales, que prohíben el envío de cargamentos al país persa.
Estados Unidos, el régimen de Israel y algunos de sus aliados occidentales acusan a Teherán de perseguir objetivos militares en sus actividades nucleares y, bajo estas falsas acusaciones, le han impuesto varias rondas de sanciones.
Irán, a su vez, encara esas acusaciones y afirma que, como miembro de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) y signatario del Tratado de No Proliferación (TNP), tiene derecho legítimo a desarrollar su programa pacífico.
Asimismo, Teherán ha advertido en reiteradas ocasiones sobre las negativas repercusiones que dejarán las sanciones antiraníes contra la economía mundial.
km/ybm/hnb
Abaspur reiteró que Francia, al sancionar la industria automovilística de Irán, no solo ha perdido el mercado del país persa, sino que también se ha quedado sin los beneficios de los mercados de otros países relacionados con Irán.
Por su parte, los directivos del sector automotriz de Francia han protestado por esta decisión de sus políticos, ya que les ha obligado a soportar una gran pérdida en este campo.
El portavoz de este Comité parlamentario, recordando que las sanciones no han tenido gran efecto sobre la industria automovilística iraní, aseguró que el tema de las sanciones contra Teherán no es nada nuevo y, por esa misma razón, no ha tenido gran repercusión sobre la economía del país.
El pasado febrero, esta marca gala decidió suspender la venta de unidades despiezadas a Irán bajo la presión de las sanciones unilaterales e ilegales, que prohíben el envío de cargamentos al país persa.
Estados Unidos, el régimen de Israel y algunos de sus aliados occidentales acusan a Teherán de perseguir objetivos militares en sus actividades nucleares y, bajo estas falsas acusaciones, le han impuesto varias rondas de sanciones.
Irán, a su vez, encara esas acusaciones y afirma que, como miembro de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) y signatario del Tratado de No Proliferación (TNP), tiene derecho legítimo a desarrollar su programa pacífico.
Asimismo, Teherán ha advertido en reiteradas ocasiones sobre las negativas repercusiones que dejarán las sanciones antiraníes contra la economía mundial.
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