Catar ha realizado un nuevo llamamiento a una fuerza árabe a fin de intervenir en Siria si los esfuerzos diplomáticos del enviado especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Liga Árabe (LA) para Siria, Lakhdar Brahimi, fracasan para restablecer la calma en el país árabe.
“Los árabes deben pensar seriamente sobre enviar fuerzas para garantizar la seguridad en Siria si los esfuerzos diplomáticos no logran resolver la crisis”, afirmó el primer ministro y ministro de Asuntos Exteriores de Catar, el jeque Hamad bin Yasem bin Jaber al Zani, en declaraciones emitidas por la televisión catarí Al-Yazira, el sábado.
“No es una cuestión de intervención en Siria en favor de una parte contra la otra, sino más bien de una fuerza para preservar la seguridad”, añadió el premier catarí, quien también encabeza un comité de la LA sobre Siria.
Catar ya había realizado una propuesta similar en el pasado mes de septiembre cuando el Emir catarí, el jeque Hamad bin Jalifa al Zani, en un discurso ante la Asamblea General de la ONU indicó que los estados árabes deben intervenir en Siria si el Consejo de Seguridad no logra detener la crisis.
El mediador internacional está tratando de avanzar sobre la base de un acuerdo alcanzado en Ginebra el 30 de junio de 2012, que busca una transición política en Siria.
Mientras tanto, las diferencias entre Rusia y Estados Unidos sobre el futuro del presidente sirio, Bashar al-Asad, continúan.
Cabe mencionar que EE.UU., junto con Catar, Arabia Saudí y Turquía, apoyan firmemente el derrocamiento del gobierno de Al-Asad.
Sin embargo, Rusia además de expresar el sábado su total apoyo a los esfuerzos de Brahimi, hizo hincapié en que la salida de Al-Asad no puede ser una precondición para un acuerdo para poner fin a los disturbios que azota desde hace 22 meses el país árabe.
Desde mediados de marzo de 2011, Siria vive fuertes disturbios organizados y financiados desde el exterior: una situación crítica que se agudiza con el correr de los días debido a la violencia ejercida por los terroristas que buscan acabar con el Gobierno Constitucional de Damasco.
“Los árabes deben pensar seriamente sobre enviar fuerzas para garantizar la seguridad en Siria si los esfuerzos diplomáticos no logran resolver la crisis”, afirmó el primer ministro y ministro de Asuntos Exteriores de Catar, el jeque Hamad bin Yasem bin Jaber al Zani, en declaraciones emitidas por la televisión catarí Al-Yazira, el sábado.
“No es una cuestión de intervención en Siria en favor de una parte contra la otra, sino más bien de una fuerza para preservar la seguridad”, añadió el premier catarí, quien también encabeza un comité de la LA sobre Siria.
Catar ya había realizado una propuesta similar en el pasado mes de septiembre cuando el Emir catarí, el jeque Hamad bin Jalifa al Zani, en un discurso ante la Asamblea General de la ONU indicó que los estados árabes deben intervenir en Siria si el Consejo de Seguridad no logra detener la crisis.
El mediador internacional está tratando de avanzar sobre la base de un acuerdo alcanzado en Ginebra el 30 de junio de 2012, que busca una transición política en Siria.
Mientras tanto, las diferencias entre Rusia y Estados Unidos sobre el futuro del presidente sirio, Bashar al-Asad, continúan.
Cabe mencionar que EE.UU., junto con Catar, Arabia Saudí y Turquía, apoyan firmemente el derrocamiento del gobierno de Al-Asad.
Sin embargo, Rusia además de expresar el sábado su total apoyo a los esfuerzos de Brahimi, hizo hincapié en que la salida de Al-Asad no puede ser una precondición para un acuerdo para poner fin a los disturbios que azota desde hace 22 meses el país árabe.
Desde mediados de marzo de 2011, Siria vive fuertes disturbios organizados y financiados desde el exterior: una situación crítica que se agudiza con el correr de los días debido a la violencia ejercida por los terroristas que buscan acabar con el Gobierno Constitucional de Damasco.
