El exsecretario de Estado de Estados Unidos Colin Powell negó hoy que mantenga su respaldo al presidente Barack Obama, como lo hizo hace cuatro años.
Quien fuera expresidente de la Junta de Jefes de Estado Mayor y miembro del gabinete presidencial de George W. Bush (2001-2009) objetó que estuviera apoyando otra vez al mandatario, quien en noviembre optará por la reelección, reportó el diario The Seattle Times.
Hace cuatro años, Powell causó un revuelo en los círculos políticos republicanos cuando se decantó por el entonces senador por Illinois, frente al candidato conservador John McCain.
En esa ocasión, Powell calificó a Obama de "figura transformadora", recordó el rotativo.
Esta vez no es así. Al menos, no todavía, aseguró el exfuncionario durante una entrevista en el programa Today de la cadena televisiva NBC News.
La cuestión no es si apoyar a Obama o Romney, sino lo que todos ganemos con ellos, acotó.
No obstante, Powell estimó que el Ejecutivo había logrado estabilizar el sistema financiero a raíz de la profunda recesión de 2008-2009 y rescató la industria automotriz.
También aseguró que pensaba que el país se encontraba en el camino correcto con la anunciada salida de las tropas de Afganistán, a fines de 2014.
Sin embargo, consideró que Obama necesitaba trabajar aún más en la tambaleante economía y escuchar las propuestas del Partido Republicano y del virtual candidato por esa fuerza, Mitt Romney.
Powell ha sido una figura enigmática en el Partido Republicano, un hombre llamado a menudo por las administraciones, su nombre ha sido manejado como candidato a la presidencia y vicepresidencia, y resultó el primer negro en ocupar la jefatura del Estado Mayor Conjunto, destacó la publicación.
El exsecretario de Estado resulta también una figura polémica tras haber presentado en la ONU supuestas pruebas que demostraban la presencia de armas de destrucción masiva en Irak, las cuales sirvieron para desencadenar la invasión contra ese país en 2002, aunque nunca aparecieron.