¿Ya vieron el documental “Atentados de bandera falsa”? se los recomiendo, clic aquí para verlo: EEUU acostumbra provocar “eventos” y después culpar a otros por ello y, respaldado en esa mentira invade países, saquea sus recursos.
En el
2003 dijo que Irak tenía armas de destrucción masiva, invadió al país
diciendo que llevaría la libertad y la democracia y lo dejó hecho CACA,
algo similar están haciendo con México con la Iniciativa Mérida y la
FALSA “guerra contra el narco”.
Ahora
quieren matar varios pájaros de un sólo tiro; Irán por un lado y México
por el otro, aumentando la creencia de que nuestro país es un riesgo
para la seguridad de EEUU por lo cual hay que ocuparlo militarmente o
aumentar la acciones de la “guerra al narco” ya que los narcos tienen
tanto poder que hasta un gobierno “hostil” a USA los busca para hacer
explotar embajadas, como si el país vecino no fuera el mejor blindado
del mundo que puede evitar que un extremista detone incluso un cartucho
de salva en algún parque.
Ayer se anunció en Washington que desarticularon un complot iraní para asesinar al embajador de Arabia Saudita en EEUU, para lo cual, en un principio, los perpetradores creyeron haber contratado a un integrante de un cártel
de la droga mexicano, que resultó ser un informante confidencial de la
DEA. ¿no hubiera sido mejor contactar con un Mata zetas? ¿esas
conspiraciones sí hay que creerlas por que lo dice el tío Sam? Nel,
mejor vean el Astillero de Julio Hernández:
Astillero
Julio Hernández
Julio Hernández
SuperFelipe deshace complot…Otro salvamento heroico…”Como libreto de Hollywood”
El superhéroe ha vuelto a salvar al mundo (o cuando menos a una
parte relevante de él).
De golpe, gracias a sus especiales poderes de
investigación inducida, frenó todo un complot internacional, colocó a
sus archienemigos conocidos como Los Zetas en una especie de
paredón binacional, metió a México en el apasionante rejuego de espías,
atentados, venganzas y maquinaciones de Estados Unidos contra Irán (y al
revés), y demostró a sus conciudadanos que a un paladín de la justicia,
como es él, El Gran Felipe, le resulta más fácil identificar a un
presunto terrorista en tránsito que a mexicanos masacrados en Veracruz o
en el tamaulipeco San Fernando (por citar sólo un par de ejemplos del
amplísimo expediente de asesinados y desaparecidos) o a jefes
narcotraficantes del cártel de Sinaloa (nomás por citar un caso, prácticamente al azar).
Es
la sublimación de las potencialidades creativas de la afamada firma
cinematográfica oficial denominada García Luna Productions, no
necesariamente porque lo reportado sea un montaje, pero sí porque el
ánimo escenográfico y la intencionalidad justificatoria son similares a
las que tanto reconocimiento han acarreado al ingeniero químico a cargo
de la seguridad pública desde el plano federal.
Sí se puede, nomás hay
que encontrar la ocasión propicia, dirían los felipistas emocionados
porque en medio de la descomposición del país ha sido posible insertar
en planos internacionales el mito genial de la calidad ejecutiva de la
inteligencia operativa mexicana: “n’ombre, y que se nos quiere colar un
cuate que disimulaba sus propósitos bajo su inconfundible nombre
original, y que lo detectamos porque tenía orden gringa de aprehensión, y
que no lo dejamos llegar acá a que se siguiera poniendo de acuerdo con
sus compinches para luego ir a Guachinton a causar vandalismo en
embajadas y asesinar a diplomáticos”.
Cien mexicanos del gobierno
dijieron, con (leer nota completa en La Jornada)
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Además
les recomiendo un artículo muy bueno que desmonta toda la mentira de la
guerra contra el narco y la injerencia de USA para intervenir
militarmente en México: Colapso prefabricado de México
Y para rematar un video de Rubén Luengas: