
“Este movimiento siempre estuvo
consciente que esta lucha, la recuperación de la educación pública y el
cambio estructural educacional chileno en su conjunto, no iba a ser una
tarea fácil y menos inmediata, sin embargo, nunca pensamos ni
sospechamos que el Gobierno iba a actuar tan sucio en este proceso”,
sostuvo la líder de la FECh.
En ese sentido, criticó que en cuatro
meses de movilización, “la principal campaña que se ha venido
evidenciado, tanto en los representantes del Gobierno como en muchos
medios de comunicación, sea tratar de desviar el objetivo de nuestras
demandas y apostar a la división y al desgaste del movimiento
estudiantil (…) y tratar de frenar nuestras demandas, que son
absolutamente legítimas y básicas”.
En este contexto, la dirigenta
estudiantil sostuvo que “el Gobierno perdió una oportunidad histórica
de iniciar un espacio de discusión, de trabajo, con garantías mínimas
que iban a posibilitar dar solución a este conflicto”.
Pese a
esto, remarcó que “hoy día, con más fuerza que nunca, este movimiento se
mantiene unificado y seguirá adelante propiciando las instancias que
sean necesarias, con responsabilidad, para lograr los objetivos”.