Pacto entre EE. UU. y narcos mexicanos, "una bomba que va a ir creciendo"

En EE. UU. procesan a un narcotraficante del cártel de Sinaloa que ha revelado que agentes federales autorizaron el tráfico de cocaína a cambio de información sobre otras bandas.

Según los abogados, el acusado tiene pruebas de que EE. UU. colaboró con su cártel durante 5 años y dio carta blanca al tráfico de drogas.

A cambio el narcotraficante proporcionaba información a los agentes sobre sus competidores.

Además asegura que en este proceso estuvieron involucrados el Departamento de Justicia de EE. UU., la Oficina Federal de Investigaciones y la Agencia para el Control de Drogas.

Según el narcotraficante, el acuerdo fue ratificado personalmente por agentes estadounidenses en una reunión en 2009 horas antes de ser arrestado por el Gobierno mexicano.

Un juez de Chicago ha fijado un plazo hasta el 11 de septiembre para que el Gobierno responda a las acusaciones. Las autoridades se niegan a comentar el asunto.

Juan José Gutiérrez, miembro de la Organización Vamos Unidos, asegura que si la información se confirma tendrá persecuciones gravísimas para Washington.

"Creo que es muy serio porque tenemos como antecedente de que las autoridades norteamericanas se han visto involucradas en situaciones sumamente comprometedoras.

Se ponen de acuerdo con un grupo para capturar a otros, en el proceso se permite el flujo libre de droga hacia el mercado de EE. UU.

Pienso que esto es un capítulo más de esa historia negra donde por un lado EE. UU. ha invertido miles de millones de dólares en una supuesta guerra contra el narcotráfico y, por el otro lado, estamos viendo ahora una vez más que en el centro de la controversia se encuentra precisamente el Gobierno federal de EE. UU. colaborando con los mismos cárteles", dijo el experto.

"Es como una bomba que va a ir creciendo y yo pienso que de confirmarse estos alegatos por el hijo de Mayo Zambada van a tener repercusiones gravísimas, políticamente hablando, en ambos lados –en la frontera y en el continente– especialmente si tenemos en cuenta que recientemente también estalló el escándalo donde otra agencia federal de EE. UU. estuvo permitiendo el cruce de armas hacia México y muchas de estas armas fueron utilizadas por miembros del cártel de Sinaloa protegido por las mismas agencias que deberían estar combatiéndolos.

Y no estaba comentado hasta este momento que más de 3.000 personas que perdieron la vida lo hicieron como resultado de armas que fueron introducidas en México ilegalmente de EE. UU.", opinó Gutiérrez.

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