En El Cairo (Egipto), unas 2.500 personas lograron irrumpir en una comisaria de Policía del barrio de Medinet Naser, donde encontraron ocho pisos subterráneos con cámaras de tortura que pertenecían a la CIA.
Dicha comisaria fue usada durante la administración de George W. Bush para torturar a sospechosos secuestrados por la CIA durante la “guerra contra el terrorismo” tal y como había anticipado Wikileaks.
Los activistas fueron guiados dentro del edificio por los relatos de numerosas personas, antiguos interrogados y torturados allí que, por teléfono o en persona, les iban indicando dónde había puertas secretas, celdas, armarios con documentos y objetos incriminatorios.
Según el relato de algunos participantes, había varias consolas de videojuegos. “Para echar unas partidas entre tortura y tortura”, dicen con un humor negro no exento de ira.
También han hallado multitud de papeles comprometedores, que en muchos casos estaban preparados para ser quemados o apilados dentro de varios vehículos para ser sacados del edificio.