MOMARANDU
Goulart partió al exilio en 1964, tras el golpe que impuso en el gobierno al general Humberto Castelo Branco, y falleció en 1976 en una estancia en Mercedes.
Nació en São Borja, Río Grande do Sul, el 1 de marzo de 1918, fue el vigésimo segundo presidente del Brasil, entre, 1961 y 1964, y murió el 6 de diciembre, 1976.
Fue víctima de una "conspiración" -dice hoy su hijo Joao Vicente Goulart-, urdida por las dictaduras suramericanas "bendecidas" por Estados Unidos.
Mario Neira Barreiro, ex miembro de un grupo de ultraderecha uruguayo vinculado con los servicios de inteligencia de ese país, preso en Brasil, confesó haber participado en el plan que adulteró presuntamente, en el Hotel Liberty de Buenos Aires, los medicamentos de Goulart.
“No me acuerdo si usamos Isordil, Adelpan o Nifodin. Conseguimos colocar un comprimido en los remedios importados de Francia. Goulart no podía ser examinado por 48 horas o esa sustancia sería detectada”, dijo.
El argumento predilecto de Jao Goulart para promover la reforma agraria en Brasil era considerar que la propiedad estaría mejor defendida cuando en lugar de 2,55 millones, Brasil tuviese 10 millones de propietarios.
En esas condiciones, la lucha por las reformas se cumplió principalmente como movilización política de masas urbanas y como esfuerzo de sindicalización de los asalariados rurales.
A ella contribuyeron desde facciones de izquierda hasta el clero.
Medidas reformistas como la constitución de un fondo de colonización mediante la expropiación de “fazendas” y latifundios improductivos, fueron contenidas en el mensaje enviado al Parlamento el 15 de marzo de 1964.
Dieciséis días después cayó el gobierno.
Lincoln Gordon, embajador de los Estados Unidos en Brasil en aquella época, admitió en 2002 que la CIA había financiado, en las elecciones parlamentarias de 1962, a los candidatos de la oposición.
En una entrevista a Roberto García, publicada en la revista Veja del 9 de marzo de 1977, el propio Gordon había confesado que los Estados Unidos habían financiado a los candidatos de la oposición a Goulart, acentuando que el desembolso “seguramente fue mucho más de 1 millón de dólares” y “no le extrañaría nada que hubiera llegado a 5 millones de dólares”.
El hijo del ex primer mandatario señala a las agencias internacionales que su familia está "decidida a llegar a la verdad". "Llevaremos el caso hasta Argentina", repite.
Documentos en mano, pedirá "tal vez después de octubre", que el Estado nacional abra una causa.
Víctima oficial de un ataque cardíaco, antes de su muerte, abrazaba el Partido Trabalhista Brasileiro la política de Goulart que adoptaba medidas socialistas, reforma agraria, urbana, salud y educación, invitaba soviéticos, Gagarin y Guevara.
Que el veneno fue preparado por el médico legista uruguayo, Carlos Miles, se dice. Pero también fue asesinado. Sin autopsia, Joao Goulart fue sepultado en su ciudad natal.
