La obscenidad de las matanzas, sus detalles de sadismo, el paisaje surrealista de cuerpos hinchados por el sol y edificios demolidos por excavadoras, todo esto contribuyó a bloquear las pruebas menos visibles de una cuidadosa planificación logística.
Una vez que los periodistas consiguieron entrar en la zona donde se había producido la matanza, sus detalladas informaciones y fotografías provocaron primero horror, "naturalizando" después el episodio con los estereotipos ya conocidos sobre los árabes: "venganza", "odio", "brutalidad primaria".
Las fotos de la matanza cobraron una extraña transhistoricidad al ser utilizadas una y otra vez por los medios occidentales, como si esos cuerpos retorcidos y abotargados nunca hubieran tenido vida.
Ariel Sharon, actual primer ministro israelí, debe ser juzgado por crímenes contra la Humanidad, crímenes de guerra y genocidio por las matanzas de Sabra y Chatila de septiembre de 1982
El pasado 18 de junio 23 personas, 15 de nacionalidad palestina y ocho libanesa, constituidas como parte civil demandante han presentado una querella ante un Juzgado de Instrucción belga contra Ariel Sharon (actual primer Ministro de Israel), Amos Yaron (en la actualidad, cargo en el ministerio de Defensa de Israel) y otros responsables israelíes y libaneses de las masacres, torturas, violaciones y desapariciones de entre 1.000 y 3.500 civiles -niños, mujeres y ancianos, en su mayoría- que tuvieron lugar entre el 16 y el 18 de septiembre de 1982 en los campamentos de refugiados palestinos de Sabra y Chatila, situados en la periferia sur de Beirut, la capital libanesa
¿Qué pasó con los agresores?
Las memorias de Robert Hatem, apodado "Cobra", guardaespaldas del comandante Elie Hobeika de las fuerzas libanesas, ni son honestas ni son historia (10). Su intento de exonerar a Sharon de su culpabilidad en las matanzas apunta al grupo de presión israelí o libanés en Washington como posibles iniciadores. La Asociación para un Libano Libre coopera estrechamente con Israel, y el libro de Hatem concluye con un llamamiento a los cristianos libaneses para que se alineen junto a Israel en contra de Siria.
Aunque dista de ser "un relato verídico" de la matanza, el libro de Hatem contiene ciertos detalles que no eran ampliamente conocidos con anterioridad como, por ejemplo, los nombres de los dirigentes de algunas de las unidades asesinas: Joseph Asmar, Michel Zouein, George Melco, Maroun Mashaalani. También da los nombres de los dirigentes de las fuerzas libanesas que "llegaron para inspeccionar la carnicería: Fadi Frem, Fuad Abi Nader (ambos se convirtieron posteriormente en comandantes de las fuerzas libanesas), Steve Nakkour, Elie Hobeika. Se cita a Hobeika como autor de la orden:
"Exterminio total... arrasad los campos". Se menciona a Sharon comunicando a los jefes de las unidades que no debe haber ataques contra los civiles. Y se omite hablar de la milicia de Haddad, otra señal de la influencia de Israel.
Algunas imágenes de la masacre de Sharon