***“Bebíamos el agua con la que nos bañábamos porque no nos daban agua potable”, dijo un migrante venezolano que fue repatriado tras haber estado preso ilegalmente en una cárcel de alta seguridad en El Salvador desde marzo.
Regresó en uno de los dos vuelos de repatriación que trajeron a los 252 migrantes a Venezuela el viernes 18 de julio. Habían sido deportados de Estados Unidos y encarcelados en el Centro de Reclusión para el Terrorismo (CECOT) en El Salvador sin el debido proceso.
Su repatriación finalmente fue posible gracias a las intensas negociaciones diplomáticas del gobierno de Nicolás Maduro con las autoridades estadounidenses.
Los testimonios de los repatriados revelan maltratos físicos y torturas psicológicas intensas, especialmente humillaciones por su nacionalidad y condición migratoria.
“Nos torturaron psicológicamente. Tuvimos que dormir en una jaula de metal sin sábanas ni colchones… solo nos dieron colchones cuando la Cruz Roja vino de visita un par de veces”, dijo un migrante a Telesur. Otro, mostrando sus heridas, se señaló la cara y exclamó:
¡Mira, me dispararon aquí!
“Esto es el infierno”
Ángel, de veintipocos años, abrazó a sus seres queridos al bajar del avión. Tras saludarse, habló con la televisión venezolana diciendo :
Fue un infierno.
“Cuando llegamos ese día, 16 de marzo, la primera persona que nos recibió fue el director [del penal], quien nos dijo: ‘Esto es un infierno’”, relató Ángel.
Si íbamos a ducharnos, nos golpeaban, nos volvían a meter en el agujero y nos volvían a golpear. A muchos otros migrantes les dispararon por intentar comunicarse con sus familiares en el exterior, lo cual nunca se les permitió.
"¡Maldito seas!"
Un video que muestra a uno de los 252 venezolanos secuestrados en el CECOT se hizo viral en redes sociales, tras el conmovedor mensaje de despedida que dejó a los funcionarios del penal.
“¡Maldito seas!”, exclamó Alejandro Colina, uno de los venezolanos detenidos injustamente en ese centro de tortura antes de abordar el avión que lo trajo de regreso a Venezuela.
En el avión contó su historia, que coincide con las declaraciones de otros migrantes sobre el trato cruel e inhumano que recibieron en esa prisión de máxima seguridad.
En conversación con la periodista de Telesur Madelein García, Colina mencionó que un venezolano, que sufría de asma crónica, fue atacado con gases lacrimógenos por los guardias.
“Entraron, lo golpearon y le lanzaron gas lacrimógeno a un compañero que estaba sentado en la celda”, relató.
“Sufre de asma crónica. Se desmayó, y todos los guardias se asustaron, y empezamos a lanzarles botellas de agua, todo lo que teníamos dentro.
Todos nos asustamos. Como nos estaban golpeando, nunca imaginaron que nos rebelaríamos. El director entró y nos pidió que nos calmáramos”. Añadió que hicieron una huelga de hambre durante tres días después de este incidente.
Explicó además cómo los amenazaron con no poder salir jamás de la megacárcel. Colina reveló que lo golpearon por decirles a los oficiales que era solo cuestión de tiempo para que el presidente Nicolás Maduro los rescatara a todos de ese infierno.
Acusado sin haber cometido delitos
Según Franco Vielma, del medio de comunicación Misión Verdad, el 75% de los 252 migrantes repatriados (unos 189) no tienen antecedentes penales. Del 25% restante, la mayoría tiene antecedentes por delitos menores.
Solo seis personas presuntamente cometieron delitos graves en Venezuela en el pasado, pero ninguna fue procesada ni condenada en Estados Unidos. Varios migrantes afirman que ni siquiera entraron en territorio estadounidense. Se entregaron a las autoridades migratorias estadounidenses en la frontera y posteriormente fueron encarcelados y deportados a El Salvador.
Imágenes del maltrato que sufren los migrantes secuestrados en la cárcel de máxima seguridad de El Salvador. (Fotos: Con el Mazo Dando)
Pellets
Diosdado Cabello, ministro del Interior de Venezuela, mostró cartuchos de perdigones al recibir a los retornados en el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar.
“Esto que tengo en mis manos es un testimonio ante el mundo sobre la rata que es Nayib Bukele. Con esto, se despidió de los jóvenes venezolanos: al bajar de los autobuses y subir al avión, les dispararon varios perdigones. Varias personas resultaron heridas”, condenó Cabello.
Muchos tenían marcas en la espalda, cejas partidas, hombros dislocados e infecciones sin tratar. ¡Fue una barbaridad!, añadió.
El ministro del Interior venezolano, Diosdado Cabello, muestra los perdigones con los que se disparó a los migrantes que retornaban en El Salvador justo antes de abordar sus vuelos de repatriación. (Foto: Con El Mazo Dando)
Por su parte, el presidente Maduro reveló que un prisionero repatriado perdió un riñón debido a las golpizas recibidas.
"Los primeros testimonios que han transmitido indican que fueron brutalmente torturados en ese campo de concentración.
Traemos a uno de ellos que perdió un riñón como consecuencia de las golpizas recibidas. Muchos fueron torturados repetidamente. Les sirvieron comida en mal estado", declaró.
El presidente venezolano advirtió,
Bukele debe saberlo: más temprano que tarde habrá justicia por lo que le ha hecho a estos venezolanos.
El rescate de los 252 migrantes marca un nuevo capítulo en la lucha por los derechos humanos de los venezolanos en el exterior, mientras el gobierno exige respuestas internacionales a lo sucedido.
Un migrante venezolano rescatado abraza a sus familiares tras regresar al país el viernes. (Foto: Con El Mazo Dando)
El padre de la bebé recién rescatada, Maykelis Espinoza, se encontraba entre quienes regresaban a casa el viernes. (Foto: Con el Mazo Dando)
( Telesur ) con contenido de Orinoco Tribune
Traducción: Orinoco Tribune
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