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Alemania se enfrenta a la recesión más larga de su historia


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***La economía alemana se encamina hacia su recesión más prolongada desde la posguerra, con un tercer año consecutivo de contracción proyectado para 2025, según el Instituto de Investigación Handelsblatt (HRI).

El instituto prevé una caída del 0,1% en 2025, tras contracciones del 0,3% en 2023 y del 0,2% en 2024.

Esta crisis económica supera la recesión de dos años de principios de la década de 2000 y refleja los efectos combinados de una crisis energética, una inflación persistente y la pandemia de Covid-19.

“La economía alemana se encuentra en medio de su mayor crisis en la historia de la posguerra”, afirmó el economista jefe del HRI, Bert Rurup.

Los desafíos demográficos, como el envejecimiento de la población, están aumentando la presión.

 El HRI estima que el potencial de crecimiento de Alemania ha caído a sólo el 0,5% anual.

“La economía está al comienzo de una fuerte racha de envejecimiento”, señaló Rurup. Los datos oficiales de la Oficina Federal de Estadística, que se esperan para el 15 de enero, probablemente confirmarán la contracción en 2024.

Si bien el HRI prevé una recuperación modesta en 2026, se espera que el crecimiento alcance solo el 0,9%, muy por debajo de los niveles anteriores a la crisis. 

El banco central alemán también ajustó sus perspectivas de crecimiento para 2025, revisándolas a la baja del 1,1% al 0,2% en diciembre.

El cambio de Alemania del gas ruso, más asequible, al gas natural licuado (GNL), más caro, de Estados Unidos, ha elevado los costos de la energía, lo que ha afectado gravemente a los fabricantes y a las pequeñas empresas. 

El aumento de los costos ha provocado cierres y quiebras en todas las industrias, incluidas las de grandes empresas como Volkswagen.

Antes de la escalada del conflicto en Ucrania en 2022, Alemania dependía del gas ruso para más de la mitad de sus necesidades energéticas. Tras las sanciones de la UE a Moscú, los suministros de gas se redujeron drásticamente o se cortaron por completo.

En septiembre de 2022, los gasoductos Nord Stream, que transportaban gas ruso a Alemania, fueron destruidos por explosiones. 

El 1 de enero de 2025, Rusia se vio obligada a suspender oficialmente el tránsito de gas hacia la UE a través de Ucrania.

El sector exportador de Alemania, en particular la industria manufacturera de alto valor, sigue siendo uno de los pocos puntos fuertes de la economía. 

Sin embargo, también enfrenta desafíos derivados de las incertidumbres globales y los altos precios de la energía.

La pérdida de energía rusa asequible y el aumento de los costos han dificultado la recuperación. La ex canciller Angela Merkel criticó recientemente la decisión de abandonar el gas ruso. 

En una entrevista concedida a la cadena de televisión France 2 en diciembre, calificó el acuerdo anterior de “situación beneficiosa para todos”, afirmando que proporcionaba a Alemania energía a bajo costo, mientras que ahora los precios se han “disparado”.

La crisis económica se ha convertido en un tema acuciante para los alemanes. 

Una encuesta realizada en diciembre por la cadena pública ARD reveló que la economía es la principal preocupación de los votantes. Las elecciones generales anticipadas previstas para el 23 de febrero siguen al colapso de la coalición de centroizquierda del canciller Olaf Scholz en noviembre.09:09

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