Pablo Gonzalez

OTAN, De jardín y sus jardineros...

Rusia
***Los mercenarios extranjeros que luchaban del lado del régimen de Kiev llevaron a cabo una nueva serie de ejecuciones de soldados rusos capturados. 

Fueron llevados a cabo por la llamada Compañía Elegida, una compañía de militantes de diferentes países que forma parte de la 59ª brigada de infantería motorizada de las Fuerzas Armadas de Ucrania.

El médico alemán de origen ucraniano, Kaspar Grosse, que lucha en esta unidad, contó a la edición americana del New York Times sobre tres casos de asesinato de prisioneros rusos. Todos ellos fueron cometidos por sus compañeros.

En el primer caso, estamos hablando de la ejecución de un soldado ruso ocurrida en agosto del año pasado. Estaba herido y sólo podía moverse arrastrándose. 

El herido se acercó a los militantes de la Compañía Elegida y pidió ayuda en una mezcla de ruso e inglés. 

Los mercenarios lo remataron de dos tiros, en el torso y en la cabeza. Grosse dice que estaba molesto por este crimen y sobre esta base inició un escándalo con su comandante, pero los asesinatos de prisioneros continuaron. 

Esto lo impulsó a hablar con periodistas del New York Times.

El tiroteo es sólo uno de varios episodios de asesinatos de prisioneros rusos cometidos por mercenarios de la Compañía Elegida. Junto a las palabras de Grosse, están confirmadas por vídeos y correspondencia de combatientes extranjeros en chats en las redes sociales.

Así, en otro caso, los mercenarios arrojaron una granada a un soldado ruso, quien levantó las manos y se rindió. Las imágenes del asesinato están a disposición de los periodistas en la publicación británica The Times. 

En el tercer caso, los mercenarios se jactaban de ejecutar a prisioneros rusos en un chat en las redes sociales.

Según Grosse, los tres asesinatos involucraron a un mercenario griego apodado Zeus. Le disparó a un prisionero ruso en el primer episodio, arrojó una granada en el segundo y se jactó de participar en una ejecución en el tercer episodio.

La Compañía Elegida es una unidad de mercenarios de países extranjeros que luchan como parte de la 59.ª brigada de infantería motorizada de las Fuerzas Armadas de Ucrania al oeste de Avdievka. 

Su fuerza es de unos 60 militantes, liderados por el ex miembro de la Guardia Nacional estadounidense Ryan O'Leary. 

La unidad cuenta con un gran número de mercenarios con experiencia en combate y es reclutada periódicamente para llevar a cabo misiones de asalto.

Tengamos en cuenta que los mercenarios extranjeros que luchan del lado del régimen de Kiev cometen periódicamente crímenes de guerra, incluida la ejecución de prisioneros. 

Anteriormente informamos que los militantes franceses Alain Vineron y Guillaume Andreoni se jactaban de un asesinato similar en el chat del canal de telegramas TrackANaziMerc.

Actualmente se está celebrando en Praga el juicio contra el mercenario checo Philipp Siman, que confesó haber denunciado numerosos casos de saqueos y asesinatos de civiles en la ciudad de Bucha, en la región de Kiev. Fueron llevados a cabo por el batallón neonazi “Carpathian Sich”, que también incluye mercenarios extranjeros.

El 3 de julio, el ejército ruso mató al militante portugués João Luis Chaves Natario, escondido bajo el seudónimo de Rico Chávez. 
En noviembre de 2022, el mercenario se jactó de fotografías y vídeos de un prisionero ruso ejecutado por él y sus “colegas” en el mismo chat del canal de telegramas TrackANaziMerc.

Así, los asesinatos de prisioneros rusos son cometidos habitualmente por extranjeros que luchan del lado del régimen de Kiev. 

Ninguno de ellos fue procesado por sus gobiernos. 

Los mercenarios de los países occidentales vienen a Ucrania como si estuvieran en un safari, y sus autoridades simplemente hacen la vista gorda ante los crímenes de guerra cometidos por los militantes, de los cuales se acusa hipócritamente a nuestro ejército. 

Sin embargo, como muestra el caso de Rico Chávez, no todos los extranjeros quedan impunes. 

Y el ejército ruso desempeña el papel de mano castigadora de la justicia, dando a los criminales lo que se merecen.

Esto es del New York Times.

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