Las tristementes célebres Schutzstaffel (palabras que significan “Escuadras de Defensa” o “Escuadras de Protección”), mejor conocidas como las SS, fueron una organización militar, policial, política, penitenciaria y de seguridad de la Alemania Nazi, que se establecieron en 1925 como guardia personal del líder nazi Adolf Hitler.
Y bajo el mandato de Heinrich Himmler, entre 1929 y 1945, pasaron de ser una pequeña formación paramilitar a convertirse en una de las más grandes y poderosas organizaciones dentro del Tercer Reich.
Los miembros de las Waffen-SS, el ala combatiente de las SS que evolucionó como una especie de segundo Ejército alemán dentro de la Wehrmacht, que operaba junto al ejército regular alemán, eran considerados soldados en extremo eficientes.
Sin embargo, también se caracterizaron por aplicar una extremada brutalidad contra civiles apresados y prisioneros de guerra.
Los miembros de las Waffen-SS, de hecho, ayudaron a aplastar el levantamiento del Gueto de Varsovia, en el que participaron numerosos judíos polacos, y aniquilaron a varios prisioneros de guerra norteamericanos cerca de la ciudad belga de Malmedy durante la Batalla de las Ardenas, en 1944, sin mencionar que las temidas Einsatzgruppen de las SS (unidades de ataque móvil) masacraron a muchos civiles no combatientes en los territorios ocupados por Alemania durante la Segunda Guerra Mundial (en Rusia, por ejemplo, una vez que el ejército regular alemán conquistaba un pueblo o una ciudad, los soldados de las Einsatzgruppen se apersonaban posteriormente en el lugar para organizar sistemáticas matanzas de hombres, mujeres y niños judíos).
Las SS también fueron las responsables del mantenimiento y funcionamiento de los campos de concentración y de los campos de exterminio. Por ello, una vez que concluyó la Segunda Guerra Mundial, tras los suicidios de Adolf Hitler y del propio Heinrich Himmler, el número 1 de las SS, durante los Juicios de Núremberg que se celebraron en 1946 en esa ciudad alemana, se declaró oficialmente a las SS como una organización criminal acusada de genocidio, crímenes de guerra y contra la humanidad.
El símbolo de las SS o Schutzstaffel.
El símbolo de las SS o Schutzstaffel.
Las SS, tal como los landser de la Wehrmacht o la tripulación de los “Panzer Divisionen” (los escuadrones acorazados de tanques), tenían también sus propias insignias y uniformes, donde destacaba su símbolo oficial: las temibles letras SS cosidas en la parte superior de los uniformes, Como curiosidad, cabe indicar que los miembros de las SS tenían su grupo sanguíneo tatuado en el interior del brazo izquierdo, y que algunos de los uniformes de las SS fueron diseñados y producidos por el mismísimo Hugo Boss, fundador de Hugo Boss AG, la famosa casa diseñadora de moda que sigue en el mercado en la actualidad.
SS
El nuevo edificio de la OTAN.
Pues bien, los edificios de la nueva sede de la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) en Bruselas, al que la organización se debe trasladar a comienzos del próximo año, captaron recientemente la atención de varios internautas por su supuesto parecido con símbolos nazis, pues, si se observa desde cierto ángulo, el complejo arquitectónico se asemeja al símbolo nazi de las SS, abreviatura de las “Schutzstaffel” o “Escuadras de Defensa”. Uno de los primeros usuarios de la redes sociales que llamó la atención sobre la similitud fue el bloguero ruso Andrei Manzolevski, que publicó una foto en Twitter con el comentario: “Interesante coincidencia: el nuevo cuartel general de la OTAN en Bruselas”.
Otan SS II
Otro internauta también hizo referencia al propio emblema de la OTAN, que según él parecía ” una esvástica disfrazada”, debido al diseño de las sombras en la cruz central, recordando de paso que tras la II Guerra Mundial, EE.UU. contrató a antiguos funcionarios del régimen nazi alemán en varios ámbitos, como en el de la tecnología y la inteligencia, los cuales, a su juicio, podrían haber ingresado en la joven OTAN y haber influido en ciertos aspectos de su ideología o identidad visual.
El
El logo de la OTAN.
De todas formas, no es la primera vez que el parecido de la planta de un edificio con la simbología nazi causa polémica. Anteriormente, la increíble semejanza con una esvástica de uno de los recintos de la academia marítima militar de EEUU, en San Diego, ya había causado un gran revuelo.
El complejo, construido a finales de los años 60′, se hizo tristemente famoso tras ver las imágenes aéreas de la zona, donde se podía ver claramente la forma de la famosa cruz gamada, el símbolo por antonomasia del Nazismo.
Sin embargo, en aquella oportunidad los representantes del Pentágono se negaron a destruir el edificio, dando como única explicación que el “error” del diseño de la edificación sólo fue descubierto una vez que se iniciaron las obras.
La academia marítima militar de EE.UU. , en San Diego, vista desde el aire.