David Scheffer, ex embajador general de los EE. UU. para Asuntos de Crímenes de Guerra (1997-2001) en la administración Clinton y negociador principal de los Estados Unidos durante la creación de no menos de cinco tribunales penales internacionales, a saber, para la ex-Yugoslavia. , Ruanda, Sierra Leona, Camboya y la Corte Penal Internacional (CPI).
Scheffer utilizó la imagen del ariete al hablar del primer tribunal penal internacional establecido en mayo de 1993, el Tribunal Penal Internacional para Yugoslavia.
Él dijo:
Para entonces, el tribunal era una poderosa herramienta judicial, y yo tenía suficiente apoyo del presidente Clinton, la secretaria de Estado Madeleine Albright, el secretario de Defensa William Cohen y otros altos funcionarios en Washington para utilizarlo como un ariete en la ejecución de las sentencias estadounidenses. y la política de la OTAN. (All the Missing Souls, A Personal History of the War Crimes Tribunals , Princeton University Press, 2012)
Esta cita es importante hoy en día, ya que resuenan los llamamientos para llevar a los ciudadanos rusos y al presidente de Rusia ante los tribunales penales internacionales, ya sea que existan o estén planeados.
Los llamamientos están siendo emitidos por los países de la OTAN, la Unión Europea, así como por las organizaciones de la ONU y por los obedientes medios de comunicación occidentales.
Karim Khan
La estrategia de la OTAN y la Unión Europea se está volviendo clara.
Su objetivo es armar la justicia penal internacional y los derechos humanos, hoy contra Rusia, hoy y mañana contra China o cualquier otro país que se atreva a decir NO a lo que Estados Unidos y sus aliados o vasallos están tratando de imponer o salvar.
Aquí están algunos ejemplos:
La CPI ha declarado tener jurisdicción sobre Rusia a pesar de que Rusia no es miembro.
Según el fiscal de la CPI, Karim Khan, eso no es un problema, “Legalmente sí, no representaría un obstáculo para nuestra jurisdicción”.
El fiscal Khan viaja a Ucrania bajo la protección benévola y totalmente imparcial de las Fuerzas Armadas de Ucrania, cuyos muchos crímenes documentados cometidos desde 2014, por supuesto, no se mencionan.
En marzo de 2022, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU nombró al juez Erik Møse para encabezar la Comisión de Investigación de la ONU sobre Ucrania que investigaría presuntos delitos en Ucrania que podrían conducir a la acusación de los rusos.
Møse fue juez en el Tribunal Penal Internacional para Ruanda de 1999 a 2009. (ver más abajo)
Pramila Patten
La Comisión de Møse también llevó a cabo su investigación bajo la muy amable protección de las Fuerzas Armadas de Ucrania.
Produjo un informe el 23 de septiembre que, como era de esperar, concluyó que los rusos habían cometido crímenes de guerra.
Como era de esperar, también concluyó que los rusos habían cometido delitos sexuales y que las víctimas tenían entre 4 y 82 años.
Tampoco sorprende que no se mencionaran los crímenes bien documentados del ejército ucraniano a partir de 2014, particularmente en el Donbas.
La Asociación Internacional de Abogados está trabajando en estrecha colaboración con la Asociación de Abogados de Ucrania para preparar los juicios penales que se llevarán a cabo en Ucrania o ante la CPI.
Mark Ellis, Director Ejecutivo de la IBA, declaró recientemente que el hecho de que Rusia no sea miembro de la CPI no es un problema.
Las autoridades políticas y militares rusas podrían ser acusadas, juzgadas y, en caso de condena y cambio de régimen, arrestadas dondequiera que se encuentren.
Josep Borrell
La Representante Especial del Secretario General de la ONU a cargo de temas relacionados con la violencia sexual, Pramila Patten, declaró en una conferencia de prensa en París el 14 de octubre que los actos de violación, mutilación y agresión sexual eran parte de la estrategia militar rusa.
También afirmó que los soldados rusos estaban equipados con Viagra . No presentó pruebas, sino que simplemente repitió como un loro el informe de la Comisión de Investigación dirigida por el juez Møse mencionado anteriormente.
Josep Borrell, el Alto Representante para Asuntos Exteriores de la UE, aprovecha todas las ocasiones posibles para amenazar militarmente a Rusia y al mismo tiempo alardear de la grandeza de la justicia penal internacional. Borrell es el hombre que dice que Europa es un jardín mientras que el resto del mundo es una selva que amenaza con invadir el jardín.
También hace un llamado a los jardineros europeos para que vayan y enseñen a los pueblos atrasados de la selva cómo deben vivir.
El producto de un orden mundial unipolar
Ramsey Clark
Es significativo el hecho de que los primeros tribunales penales internacionales después de Nuremberg se crearon en la década de 1990.
No hubiera sido posible antes de 1990.
Según el difunto Ramsey Clark , ex Fiscal General de los Estados Unidos,
No existiría la ONU si la Carta hubiera implicado de algún modo que habría un tribunal penal.
Si se hubiera puesto directamente, la reunión habría terminado.
La gente habría empacado sus maletas en Washington antes de la reunión de San Francisco y se habría ido. Estados Unidos habría sido el primero en irse. ( Ruanda y la nueva lucha por África , p. 171)
Los tribunales establecidos en la década de 1990 son un producto puro del Nuevo Orden Mundial anunciado por George HW Bush después de la caída de la Unión Soviética.
Iba a ser un orden mundial unipolar liderado por Estados Unidos.
Estados Unidos controlaría las instituciones internacionales, haría las leyes, identificaría a los culpables, los acusaría, juzgaría y castigaría, sin rendir cuentas por sus propios actos.
La administración Clinton asumió en 1993 para liderar la creación de los tribunales de los que su negociador se jactó como un “ariete en la ejecución de la política de Estados Unidos y la OTAN”.
Ramsey Clark insistió:
No subestimaría el error central de seleccionar personas para enjuiciamiento. Son los enemigos los que están eligiendo. Realmente es guerra por otros medios y es muy cruel. (Ibíd., pág. 185)
El Tribunal Penal Internacional para Yugoslavia (TPIY) recordaba un juicio estalinista en el que se procesaba principalmente a serbios, pero no a funcionarios estadounidenses ni de la OTAN. [Fuente: icty.org ]
Así funcionaban los tribunales. En la ex-Yugoslavia, principalmente los serbios fueron acusados, pero no se mencionó ni una palabra sobre el bombardeo masivo y la destrucción de la ex-Yugoslavia por parte de la OTAN.
El Tribunal Penal Internacional para Ruanda fue probablemente el peor caso de justicia del vencedor.
Mientras que la guerra estaba en su apogeo cuando ocurrieron los hechos en cuestión, solo fueron acusados los miembros del gobierno anterior o los opositores del Frente Patriótico de Ruanda (RPF) y su líder Paul Kagame, que estaba respaldado por EE. UU. y el Reino Unido.
A pesar de las pruebas irrefutables de los crímenes cometidos por el FPR y por el propio Paul Kagame, que desencadenó los asesinatos en masa en Ruanda al invadir ilegalmente el país desde Uganda y, como indican las pruebas, derribó el avión del presidente hutu Juvenal Habyarimana , él y todo su ejército han disfrutado de total impunidad.
¿Qué ha pasado con las personas absueltas, sentenciadas o sentenciadas y eventualmente liberadas por el Tribunal Penal Internacional para Ruanda?
En resumen, algunas de las personas absueltas o “liberadas” siguen bajo arresto domiciliario en Níger años después de haber sido absueltas o “liberadas”, apátridas, sin papeles, sin derecho a reunirse con sus familias y/o abandonadas por un canguro internacional. tribunal.
El Tribunal Penal Internacional para Ruanda estaba tan politizado, si no más, que el tribunal para Yugsolavia. [Fuente: unictr.irmct.org ]
Otros son enviados a colonias penales del siglo XXI en Benin, Malí y Senegal, pero no a La Haya, sede de la CPI. Es un apartheid judicial para los africanos.
Surge la pregunta: ¿Cómo podría la Alta Comisión de Derechos Humanos de la ONU confiar la investigación de los crímenes en Ucrania a un juez como Erik Møse que dejó a su paso una violación tan flagrante de los derechos humanos y que ha guardado silencio sobre la solución del problema?
Déjà vu de nuevo
Los llamados actuales para acusar a las autoridades rusas, a los ciudadanos y al presidente de Rusia se parecen exactamente a lo que la OTAN hizo en 2011 a Libia ya Muammar Gaddafi.
En marzo de 2011, poco después de que la embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Susan Rice, declarara que Gadafi estaba proporcionando Viagra a las tropas libias para ayudarlas a violar mujeres, el muy obediente fiscal de la CPI, Luis Moreno Ocampo, subió la apuesta y dijo que Gadafi había ordenado que cientos de mujeres ser violada y que el propio Gaddafi “decidió violar”. No presentó pruebas.
La Comisión de Derechos Humanos de la ONU también envió rápidamente investigadores para identificar los delitos cometidos, incluida la violación y el uso de Viagra por parte de las Fuerzas Armadas de Libia.
Cuando salió su informe en marzo de 2012, los investigadores concluyeron que no había evidencia de ninguna política sistemática de violencia sexual.
No obstante, Moreno Ocampo insistió en que las nuevas autoridades libias tenían pruebas irrefutables en ese sentido.
Parecía querer proporcionar más propaganda para justificar la destrucción de Libia y el asesinato de Muammar Qaddafi el 21 de octubre de 2011. (Fuente: Slouching Towards Sirte : NATO's War on Libya and Africa , Maximilian Forte, Baraka Books, 2012, pp. 253-256.)
Rusia no es Libia
Afortunadamente, Rusia no es Libia y el mundo unipolar está chisporroteando. Sin embargo, los viejos hábitos tardan en morir y pueden continuar destruyendo personas y vidas.
Aunque los promotores de la llamada justicia penal internacional van a tener dificultades para hacer realidad sus sueños, todavía pueden ganar puntos de propaganda, especialmente cuando la mayoría de los medios occidentales se conforman con repetir como loros a los portavoces de la OTAN y la UE.
https://mronline.org/2022/11/16/attempt-to-try-russian-leaders-for-war-crimes-is-part-of-the-wests-weaponization-of-the-international-criminal-court/
