Los políticos israelíes suelen hacer comentarios escandalosamente racistas sobre los palestinos que la mayoría de los estadounidenses condenarían. Entonces, ¿por qué Estados Unidos continúa enviando a Israel casi $ 4 mil millones al año?
Israel y sus partidarios sionistas no dudan en vender propaganda alegando que es " la única democracia de Oriente Medio ".
Según ellos, Israel es un santuario único de democracia, libertad y pluralismo que protege los derechos de sus ciudadanos. Pero esto es una mentira descarada.
La democracia en Israel solo se aplica a los judíos israelíes, y no es necesario profundizar para ver las crudas contradicciones de sus afirmaciones.
Israel Hayom es el diario israelí de mayor distribución , propiedad de la familia Adelson.
El difunto Sheldon Adelson era un partidario de derecha del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y una vez dijo en una conferencia del Consejo Israelí-Estadounidense que "el propósito de la existencia de los palestinos es destruir a Israel". Añadió: "Entonces, Israel no será un estado democrático, ¿y qué?"
Efraim Eitam es un general de brigada israelí retirado que es un sionista ultranacionalista religioso. Recientemente fue entrevistado por Israel Hayom. En esta entrevista, sin pedir disculpas hizo varias declaraciones sobre los ciudadanos palestinos de Israel que deberían sonar despreciables no solo para los estadounidenses, sino para cualquier ser humano decente:
"Permitir que los árabes israelíes entren en el gobierno equivale a perder una guerra".
"Los árabes israelíes son ciudadanos del estado, pero de ninguna manera son una parte esencial de la empresa sionista".
"El hecho de que los árabes israelíes se hayan convertido en parte del liderazgo del país cruza una línea seria".
"Ha habido un consenso entre la derecha y la izquierda: [los árabes israelíes] pueden ejercer su derecho civil al voto, pero no pueden ser parte del gobierno, el ejecutivo y la rama de toma de decisiones".
"Los árabes israelíes trabajan en pandillas".
En una entrevista anterior con Haaretz, Eitam esencialmente compara a los palestinos con el cáncer, y aboga por que los palestinos sean expulsados a un estado que se establecería tanto en territorio egipcio en el Sinaí como en Jordania.
Se podría pensar que Eitam es un extremista de derecha marginal que no representa a la mayoría de los israelíes. Pero la triste realidad es que demasiados israelíes no condenan sus espantosas creencias, y él no es de ninguna manera un caso atípico.
La verdad es que el racismo, la intolerancia y la supremacía judía están arraigados en la sociedad israelí, y Eitam es simplemente un producto de ello.
¿De qué otra manera podría Benjamin Netanyahu ocupar el cargo de Primer Ministro de Israel durante 15 años? Durante las elecciones israelíes de 2015, Netanyahu advirtió a los electores que "los votantes árabes están saliendo en masa" para motivar a los judíos israelíes a que se presenten a votar. Netanyahu y su partido Likud ganaron fácilmente esas elecciones. En el pasado, también se refirió a los ciudadanos palestinos de Israel como amenazas demográficas.
¿De qué otra manera podría el actual primer ministro israelí, Naftali Bennett, poder decir : "He matado a muchos árabes en mi vida y no hay ningún problema con eso", sin una gran reacción de los israelíes? ¿O que un estado palestino soberano sería un " suicidio " para Israel?
¿De qué otra manera podría Ayelet Shaked, quien dijo que el pueblo palestino es el "enemigo" y que todos son terroristas, y que las madres palestinas de "serpientes" deberían ser asesinadas, lograr servir como Ministra de Justicia israelí de 2015 a 2019, y actualmente como ministro del Interior?
¿Y cómo podría el propio Eitam servir como miembro de la Knesset israelí desde 2003 hasta 2009, incluso en funciones ministeriales, si los israelíes no toleraban al menos sus actitudes repulsivas?
La respuesta a estas preguntas es muy simple: Israel es un estado racista y muchos israelíes son racistas activos o pasivos. De hecho, el racismo contra los palestinos es recompensado, razón por la cual Netanyahu, Bennet, Shaked, Eitam y muchos otros han podido ocupar puestos clave dentro del régimen israelí.
El propio Eitam admitió que tanto la derecha como la izquierda israelíes están de acuerdo en que los palestinos no deberían ser parte del gobierno.
Irónicamente, la severa opresión y vilipendio de Israel de sus ciudadanos palestinos y de los palestinos que viven bajo ocupación y asedio en Cisjordania, Jerusalén y Gaza, es en realidad un reflejo "democrático" del racismo judío israelí. Si la mayoría de los judíos israelíes se opusieran al horrible trato que el Estado da a los palestinos, simplemente no lo permitirían.
De hecho, una encuesta de 2015 realizada por el Pew Research Center en Israel encontró que casi la mitad de los judíos israelíes creen que los palestinos deberían ser expulsados o "transferidos" de Israel. Además, el 79 por ciento cree que los judíos israelíes merecen un "trato preferencial" sobre los palestinos y otras minorías no judías.
Este punto de vista no es exclusivo de los colonos ni de los israelíes más religiosos; está muy extendido entre los judíos israelíes de todos los orígenes. En una encuesta más reciente de principios de 2021, casi la mitad de los israelíes religiosos y casi una cuarta parte de los israelíes laicos apoyaron la idea de revocar la ciudadanía de los ciudadanos palestinos.
Claramente, estas cifras proporcionan una fuerte evidencia de que las actitudes racistas israelíes no están ni cerca de los márgenes de la sociedad.
Imagínese si un congresista, senador u otro político en los Estados Unidos dijera que permitir que los negros participen en el gobierno cruzaría una "línea seria". O que son amenazas demográficas y no una parte esencial de Estados Unidos.
O que trabajan en pandillas y que las madres negras deben ser asesinadas, junto con sus hijos “serpientes”. ¿Qué pensarían los estadounidenses? La reacción y el alboroto serían monumentales, y con razón.
Es fundamental que el pueblo estadounidense tome conciencia de estas cuestiones y las contemple, a fin de presionar a sus legisladores y representantes para que cesen su apoyo general inmoral, injusto e innecesario a Israel. Es una vergüenza que Estados Unidos continúe dando al estado racista de Israel casi cuatro mil millones de dólares al año, cuando ese dinero podría usarse para mejorar algunos de los muchos problemas y necesidades domésticos en casa.
Con el tiempo, la verdad se expondrá ampliamente e Israel tendrá que responder por su racismo y sus crímenes. Es solo cuestión de tiempo.
https://mondoweiss.net/2021/08/ending-u-s-support-for-israeli-racism/
