La derecha internacional ha estado protestando porque en las últimas semanas, la Policía Nacional del gobierno Sandinista, ha capturado a 26 personas.
Algunas de ellas están siendo acusadas de una variedad de delitos que van desde actos que menoscaban la independencia, la soberanía y la autodeterminación incitando la injerencia extranjera, pedir intervenciones militares, organizarse con financiamiento de potencias extranjeras para ejecutar actos de terrorismo y desestabilización, proponer y gestionar bloqueos económicos y comerciales; hasta demandar, exaltar y aplaudir la imposición de sanciones contra el Estado de Nicaragua y sus ciudadanos.
Aunque en ese grupo de los 26 capturados hay cierta diversidad, hay 3 cositas que los une y los identifica:
1. Todos, sin excepción, han recibido plata de organizaciones políticas extranjeras para realizar acciones políticas con la finalidad de derrocar al gobierno establecido por la vía electoral, obedeciendo al designio de una potencia que aboga por un cambio de régimen.
2. Algunas personas del grupo –dijéramos los mandamases, managers (¡así en inglés!) capataces, financieros, dirigentes, líderes, voces cantantes— son parte de la oligarquía nacional y están muy bien emparentados (como es el caso común y corriente de las oligarquías latinoamericanas).
Cristiana Chamorro, la directora de la Fundación Chamorro (hija de la ex presidente Violeta Chamorro y ahora conocida como la novia del NED), es la mas embarrada en el escándalo de corrupción masiva (porque además de los cargos citados en el primer párrafo, esta Fundación movió millones de dólares sin reportarlos al fisco nacional [Sí. Así como lo oís: millones de dólares!] lo cual la hace ¡inmediatamente!, por la ley internacional, sospechosa de lavado de dinero) y ha repartido a diestra y siniestra y masivamente financiamiento político a sus dos hijos (que aparecen como Ejecutivos de la Fundación ganando súper-bien –a como lo merecen los cipotes de la oligarquía), a su tío Jaime –Director de La Prensa, a sus dos hermanitos, a un primo hermano y a un pariente ex presidente del COSEP (todos de apellido Chamorro y todos con las ganas de ser presidentes una vez que se diera el cambio de régimen), y a un par de compañeritos de colegio o de country club.
Y resulta ahora que según los recibos de los libros de la infame Fundación, la generosa Cristiana les repartió un platalal que no es jugando. Todo con la excusa que es para promover la democracia con la finalidad de un cambio de régimen (frase famosa que Washington tiene décadas de estar usando exitosamente).
La Fundación de la Corrupción, también repartió migajas a unos cuantos periodistas y miembros de organizaciones que no querían quedarse fuera de la fiesta y se comprometieron a la causa de cambio de régimen, sin importarles que era parte de la agenda política de una potencia extranjera y sin importarles las consecuencias legales pues a como dicen por allí: con la plata baila el perro.
3. Algunas personas de este grupo son ex militantes Sandinistas con activa participación en la guerra de liberación y con el legado de un aura guerrillera y militante que tuvieron en la década de la Revolución Popular Sandinista, y que se disolvió cuando abandonaron el Sandinismo en 1990 cuando los Chamorros derrotaron al FSLN en la contienda electoral (también patrocinada por la misma potencia extranjera que financia el cambio de régimen de hoy en día y que inició el período de los 16 años de neoliberalismo implacable).
Estos ex guerrilleros terminaron trabajándole a la oligarquía que los desplazó en 1990 y se convirtieron en empleados de segunda categoría del imperio contra quien lucharon durante la lucha guerrillera. A una acción tan radical de cambio de dirección le dicen en mi barrio la mazancuepa política –algo así como el volantín, la acrobacia— la mazancuepa es un salto en el que el protagonista aterriza exactamente en una posición opuesta a la original. Y de guerrilleros heroicos a ser recipientes de la generosidad de la Fundación Chamorro es una transición como bastante vergonzosa –me parece a mí, y no se como vos pensás.
El resto de las personas favorecidas con la generosidad Chamorro son un par de dueños de medios, locutores, periodistas, y activistas de las redes sociales militando en la derecha nacional y todos en su momento han tenido cierto eco en la audiencia de la derecha periodística nacional.
En otras palabras, todos son gente conocida, y aunque no tengan conexión familiar con los Chamorros o compartan algo de abolengo o aristocracia con ellos, por lo menos comparten su ideología ultra-derechista y neoliberal –razón por la cual salieron premiados con la muestra de genero$idad de la Cristiana.
Pero, la pregunta que surge es sencilla:
¿De dónde sacó la Fundación Chamorro tanta plata para repartir a manos llenas y por qué tanta generosidad?
La operación es muy simple: el NED (National Endownment for Democracy) y el USAID seleccionaron a la Fundación Chamorro como la organización intermediaria para coordinar el financiamiento y las actividades políticas afines a sus planes en Nicaragua.
Le dieron los chambulines y la Cristiana Chamorro estaba a cargo de seleccionar a los agentes internos a cargo de recibir financiamiento a cambio de actividades políticas y el performance del golpe.
Obviamente, una gran cantidad de estos agentes, resultaron siendo miembros de su propia familia (la transparencia brilla orgullosamente en la Fundación Chamorro).
Para ir resumiendo, se podría decir que este es el intento de una familia de la oligarquía de no perder el poder histórico de manejar el país como su finca.
La familia organiza el golpe, lo financia (con la plata de sus padrinos extranjeros), y premia a sus allegados: a la derecha compatible con su tradición familiar; y a la izquierda light ligada al hermanito menor (Carlos Fernando), quien en su juventud tuvo su aventurita revolucionaria dentro de las filas del FSLN y luego con el MRS –grupito de amigos ex Sandinistas, ahora con nombre nuevo divorciado del Sandinismo de sus raíces. Es pues, un asunto de familia (no quiero ni que se les ocurra pensar en aquella película en donde los protagonistas son todos de apellido Corleone).
La ideología y el discurso de esta derecha nicaragüense peleando por una democracia subsidiada
De nuevo –y aquí me repito como disco rayado—la derecha nacional en este escenario manejada por el financiamiento de los Chamorros para un cambio de régimen (imagínense financiando un golpe con reales ajenos!) tiene una ideología un poco rara: si el Sandinismo lucha por los pobres; los golpistas luchan por los ricos.
Son como una especie de Robin Hood al revés: le roban al pobre para darle al rico (no inversión en la educación, la salud, la vivienda, las oportunidades de una vida mejor es directamente robarle al pobre para dárselo al rico en la forma de corrupción masiva que ellos han empleado desde que se apoderaron del país hace 200 años).
En esta dinámica del enriquecimiento de clase, en la mesa de negociación está la intervención extranjera para garantizar que la inversión (los millones repartidos) de la potencia extranjera de los réditos buscados por esa potencia extranjera: si el Sandinismo lucha por soberanía y autodeterminación, la derecha oligárquica lucha por la dependencia y el avasallamiento a una potencia .
¿Cuál es el discurso para justificar esta dinámica vergonzosa?
Tienen un discurso experto en la utilización de términos de efecto placebo mentirosos en sí mismos pero que de tan repetidos adquieren el carácter de verdad o creencia; sirven como relleno impidiendo pensar con claridad o impidiendo el desarrollo de una opinión diferente o crítica sin hostilidad.
En Nicaragua, la derecha se ha apoderado del término “democracia”, al punto que al referirse a ellos mismos se auto-denominan “las fuerzas democráticas”, tratando de ocultar que el FSLN es el responsable de la incipiente democracia en Nicaragua, y que éste ha respetado irrestrictamente las reglas electorales de la democracia, junto a la institucionalidad y legalidad del sistema; mientras hace esfuerzos extraordinarios para aminorar la brecha social, desarrollando planes concretos para que la mayoría de la población empobrecida pueda recibir los beneficios sociales que históricamente le ha negado la derecha nacional.
De igual manera, ahora se está asegurando con mucha convicción propagandística que el gobierno del pueblo es una Dictadura.
En definitiva, se trata de la vieja receta goebbelsiana de que ‘una mentira repetida mil veces se convierte en una verdad’ -lo que Jean Pierre Faye definió como ‘principio de creación de aceptabilidad’: algo que se multiplica exponencialmente, en eficacia e intensidad, a través de los medios de comunicación de la familia Chamorro y los boletines electrónicos de los llamados “medios independientes” que nos bombardean con sus mentiras noche y día.
En el plano global vemos—para poner un ejemplo de los gringos en Irak un par de décadas atrás—que la reiteración sobre las armas de destrucción masiva (WMD en inglés) acabó instalando éstas, como una certeza, en el imaginario de las sociedades receptoras.
Meses después, con reticencias, fue aceptándose su inexistencia pero ‘la existencia de palabras’ había hecho creer en ‘la existencia de cosas’.
Y esta estrategia se completó instalando ‘juicios de valor’ mediante la denominación de sus acciones, como ya se viene haciendo desde hace dos décadas: la invasión de Panamá en 1989 se denominó ‘Causa Justa’; la de Somalia en 1992, ‘Restaurar la Esperanza’; Haití en 1994, ‘Rescate de la Democracia’, y así sucesivamente hasta la ‘Libertad Duradera’ después de los ataques del 11 de septiembre.
La Simplificación Conceptual.
La derecha oenegista no trata de hacer un análisis serio, ni de pensar críticamente, sino de imponer la Agenda de las discusiones sobre los temas nacionales insertando conceptos equivocados y simplistas.
La Dictadura del Sandinismo y la Libertad que ofrece la derecha, son dos conceptos simplificados e impuestos para evitar que la población pueda pensar críticamente.
Perfectamente se podría decir que históricamente la Dictadura—en los ciento y pico de años de existencia nacional—ha sido la forma de gobierno que la oligarquía nacional ha practicado sobre la población pobre e indefensa; y que la Libertad es un concepto ambiguo que nunca ha estado ni en la oferta económica ni en la oferta política que le hace la derecha al pueblo de Nicaragua.
Esto hace que el “análisis” de la derecha esté reducido a la mera semántica, que rehúsa explorar la complejidad de los conceptos, reducidos a meras palabras “claves” que adornan la propaganda política de los seguidores de la fauna derechista.
Conclusión
Este es el poster elaborado por La Prensa (el periódico de los Chamorros), en donde justifican los crímenes al darles un color “político”
Los presos del grupito de la Fundación Chamorro están involucrados en un complot clarísimo financiado por una potencia extranjera.
Lo lógico desde la óptica ultra-derechista es clamar el estatus de presos políticos o de consciencia brutalizados por sus ideas.
Ese es el escudo protector para justificar la injerencia, la violación de nuestra soberanía y la complicidad con el interventor extranjero, a como pueden ver en el gráfico mentiroso del periódico de los Chamorros.
En un país sin leyes la gente puede tragarse ese cuento de caminos, pero en la Nicaragua Sandinista, Raymundo y todo el mundo saben perfectamente que son presos comunes (que me perdonen los presos comunes si los ofendo con esta comparación) que tienen que recibir –para que se haga justicia— todo el peso de la ley.
https://carloscoreaonline.com/2021/07/11/los-presos-politicosde-nicaragua-cambio-de-regimen-o-con-la-plata-baila-el-perro/?fbclid=IwAR0Mqsi8FUuTunyNqA3ZzVcNo0jrsmBBUJPssMqZCjyNTm7empXjvVecOcc
