
Un ejército de médicos, enfermeras y personal de salud en Nicaragua batallan día a día contra la pandemia de la COVID-19, invirtiendo tiempo, sacrificio y dedicación.
Hoy nos cuentan como ha sido su ardua labor para salvaguardar la vida y el bienestar de las familias nicaragüenses.
El Dr. Erick expresó que, “ver salir a todos esos pacientes, 12, 15 pacientes de una vez de alta, es una sensación muy bonita”.
En los testimosnios la licenciada Ana solís, destacó que, “todos nos sentimos felices, nos sentimos alegres, todos los familiares que están afuera aplauden y se ponen de pie”.
“Es una sensación de alegría, es indescriptible la satisfacción que siente el personal médico, que siento como médico al ver a una persona que se recupera y que vuelve con su familia”, indicó la Dra. Karen Bermúdez.
Asimismo, la Lic. Francia Hernández manifestó que la gente llora, la gente se emociona, la gente se arrodilla y aplaude cada vez que sale un paciente recuperado de Covid-19, “es algo que no se puede explicar, pero es algo que me llena”.
Los testimonios de médicos y enfermeras muestran el gran amor y la satisfacción de ver a sus pacientes salir bien del hospital, la licenciada Vilmaricia Cerda exclamó, “saber que va junto con su familia es una experiencia que la verdad no tengo palabras para describirlo”.
Una de las enfermeras mencionó que siempre hacen una oración todos juntos, en donde piden por todos los pacientes que van a recibir para que ellos traten de mejorar y que logren vencer la batalla contra el Covid-19.
Cada uno de los miembros del personal médico nicaragüense destacaron que Dios es el que hace el milagro y que les ayuda para atender a los pacientes, ellos confian en que Dios los va a ayudar y sacar adelante para ganarle la batalla al Covid-19, y que con la fe en Dios, y el esfuerzo todos van a salir adelante.