
Es algo que se ha vuelto sistemático: cuando la gente, cualquier gente, expresa su oposición al poder que controla su país –y esto sucede en todas partes… menos en los países de los «Cinco Ojos» [1]–, grupos afiliados a la NED estadounidense asumen el control de los manifestantes, a espaldas de estos.
Esta estrategia no tiene absolutamente ninguna relación con las situaciones particulares de los países afectados, ni con la legitimidad –real o supuesta– de los reclamos.



Los movimientos populares deben aprender que no es válido aceptar cualquier apoyo. Depende de dónde venga.
Esos grupos no están interesados en el triunfo de los reclamos de los manifestantes.
Sólo tratan de debilitar a los países.
[1] Los «Cinco Ojos» son un alianza militar que se basa, desde 1942, en la Carta del Atlántico.
Sus miembros son Australia, Canadá, Estados Unidos, Nueva Zelanda y Reino Unido.
Esta alianza se conoce principalmente por haber generado el sistema Echelon, dedicado a la intercepción satelital de las comunicaciones telefónicas a escala mundial.
La National Endowment for Democracy (NED), creada por el presidente estadounidense Ronald Reagan en 1983, es una agencia estadounidense cuyo presupuesto, aprobado por el Congreso de Estados Unidos, está incorporado al presupuesto del Departamento de Estado y orgánicamente vinculado a agencias similares existentes en cada uno de los países miembros de los Cinco Ojos.
https://www.voltairenet.org/article207336.html