La golpista Alianza Cívica, un tentáculo nacido de los vende patria del MRS confabulados con el Clero de la Iglesia Católica y un sector del empresario nicaragüense, ha solicitado la reanudación de la mesa del diálogo por que en la calle fueron derrotados y además perdieron el apoyo que tuvieron las primeras semanas de las asonadas.
La urgencia de dialogar es con el único objetivo de buscar ciertas prebendas para ellos, lo primero es no salir con las manos vacías y conseguir la personería jurídica como partido político para su movimiento y además negociar algunas cuotas de poder para los cambios de magistrados del poder electoral y judicial.
Sin embargo está demostrado que quienes están en esa mesa de diálogo no representan a sectores políticos, económicos ni sociales, únicamente a su movimiento que subió y bajó tan rápido como la espuma.
Sino veamos y preguntemosnos a quién representa cada uno de ellos. Azahalia Solís y Sandra Ramos está en nombre supuestos grupos de mujeres pero se desconoce la cantidad que aglutinan, poro tanto son una minoría, Luis Sánchez le trabaja a la Prensa y representa a los Chamorros, Carlos Tunnermann es un político fracasado, se representa sólo a él sin movimientos sociales ni políticos, Léster Alemán, Victor Cuadras y compañía de jóvenes sólo se representan a ellos, en las universidades carecen de una organización estudiantil legalmente constituida, es más, hasta ahora no se ha confirmado que ellos sean alumnos activos de alguna universidad, Michael Healy está como Faganic y representa a unos pocos ricos ganaderos e incluso se habla que es testaferros de unos colombianos, en otras palabras lo que tiene no es de él y su sector es mínimo en la parte agropecuaria, pues la producción agrícola y ganadería en mayor cantidad está en manos de los pequeños campesinos, Juan Sebastián Chamorro, burgués aunque no tiene un capital que signifique representativad, está como FUNIDES, organización no gubernamental que no representa a nadie, es más se desconoce el por qué de su presencia en la mesa del diálogo nacional y creo que se debió como una imposición del COSEP porque en este intento de golpe de estado era una de su figura como candidato presidencial, por eso vimos al pingüino Arellano arremeterla contra él; es más, Chamorro no debió estar en esa mesa de diálogo, sólo se representa a él en busca de cámaras.
José Adan Aguerri y Maria Nelly Rivas están sentados ahí en nombre de los empresarios, sin embargo, la mayor inversión privada como son las empresas de zona franca tomaron distancia de ellos y entonces me surge la inquietud si en realidad este consejo es la representación de la empresa privada; pienso que no es así.
De Aguerri se rumora que no tiene una sola empresa propia.
El ahora reo acusado por múltiples delitos, Medardo Mairena, únicamente representa a una minoría de campesinos, los que están en la zona del canal, un movimiento que perdió la perspectiva de su lucha y se convirtió en otro tentáculo del MRS,sirviendo como un operador político y no de la lucha social que iniciaron.
Esa falta de representativad de estos miembros de la Alianza Cívica, que se autonombraron ellos en nombre del pueblo de Nicaragua y si le sumamos lo que popularmente llamamos Alagartados, la echaron toda, creyeron que en pocos días botarian al gobierno del Presidente Daniel Ortega, pensaron que las bases del Sandinismo estaban frágil, se fueron de boca y su desesperación por asaltar el poder les llevó a cometer errores con la ola de violencia que azotó el país durante tres meses, llevándolos a perder el apoyo que tuvieron en las primeras semanas de sus protestas.
La población se cansó de estar secuestrada y asediada por bandas de narcoterrorismo, que cometieron la peor cantidad de crímenes, nunca antes visto en la historia moderna de esta nación, dando como resultado que los golpistas perdieran el apoyo total quedando reducidos casi a nada en las calle, desertando sus seguidores que pronto se dieron cuenta hacia donde eran conducidos y con qué tipo de delincuentes estaban tratando.
Hoy en las calles demuestran ser una minoría, mientras el Sandinismo muestra su músculo, su fortaleza, su solidez, que estuvo guardado no por miedo sino por disciplina partidaria, porque esa fue la orientación del máximo líder del FSLN, Comandante Daniel Ortega, de mantenerse en la casas resguardando las vidas de la militancia sandinista.
Ahora ha surgido el llamado de la Alianza Golpista a reanudar el diálogo por que están claros que ya no tienen fuerzas humanas ni económica, como lo demostraron cuando arrancaron; ahora no quieren irse con las manos vacías porque se terminan de hundirse y al menos buscarán su personería jurídica, alguna magistratura dentro del poder electoral y judicial, lo primero es posible que lo consigan porque es parte de los acuerdos que ha venido trabajando el gobierno con la OEA, de lo segundo no creo que obtengan ni un apoyo para el cargo de asistente de un magistrado.
Esta Alianza Cívica no es representativa y por alagartados se Jodieron, se quedaron con su junta de gobierno en papel, sin Beatriz y sin Retrato, mientras ellos se hundían sólos por sus ansias de poder, el Comandante Ortega se llenó de paciencia y los dejó que sólitos se metieran el puñal, claro eso costó la vida de más de 300 hermanos Nicaragüenses y pérdidas económicas millonarias, provocadas por las bandas de sicarios, paramilitares y narcoterroristas contratados por la Alianza Cívica, con el financiamiento del gobierno norteamericano, más el beneplácito de la Conferencias Episcopal de Nicaragua que firmó parte de este golpe suave.
Se requiere cambiar de actores para restablecer el diálogo y construir la paz verdadera y la reconciliación en nuestra amada patria.
Matagalpa, 24 de julio 2018
