Una guerra como la de Yemen, que ha causado verdaderos estragos entre la población civil, es difícil de “vender” a los lectores de noticias.
Eso condujo a los saudíes a dirigirse a las agencias anglosajonas especializadas en comunicación para obtener la complicidad y el silencio de los medios.
Siguiendo su consejo, el 22 de enero la coalición saudí en Yemen lanzó un engañoso plan de ayuda humanitaria, llamado Operaciones Humanitarias Integrales en Yemen (YCHO) con sede en Londres. No fueron muy originales: las age ncias de publicidad “venden” las guerras de agresión modernas como “ayuda humanitaria”, para lo cual deben obtener la cobertura de las ONG del ramo que, a su vez, “informan a los medios”. Una “noticia” que lleva el respaldo de una ONG logra que la peor guerra sea digerible.
La YCHO dispone de cuentas en Facebook, Twitter, Instagram, Youtube y Gmail y su mecanismo de funcionamiento es simple: fabrica determinado tipo de “noticias” que después se envían a las oficinas de las principales ONG, a los partidos políticos y a los parlamentarios.
Recientemente una investigación de la agencia de noticias Irin (Integrated Regional Information Networks) revela que las “noticias” inventadas por YCHO ni siquiera tenían su origen en Arabia saudí sino en las oficinas de PR (Paperfield Global Counsel), una agencia británica de imagen y publicidad.
La agencia Irin, creda en 1995, forma parte de la Oficina de Coordinación de Asutos Humanitarios de la ONU.
El informe muestra que la presentación en PowerPoint utilizada para presentar el plan de YCHO a altos funcionarios de la ONU fue redactada por Nicholas Nahas, de Booz Allen Hamilton, una empresa consultora de Estados Unidos que participó en los programas de vigilancia masiva Swift y Prism y que actualmente -según Irin- tiene 35 ofertas de ayuda.
Las “noticias” de YCHO iban acompañadas de una invitación para visitar Yemen. Buscaban candidatos que pudieran “proporcionar asesoramiento, planificación y experiencia militar para apoyar la coordinación de operaciones dirigidas por la coalición para contrarrestar una amenaza conjunta y facilitar los recursos necesarios para tales operaciones”.
Otra empresa de relaciones públicas responsable de “vender” la YCHO es Qorvis MSLGroup que, según Irin, registró más de 6 millones de dólares en ingresos de la embajada saudí en Estados Unidos en un período de doce meses hasta septiembre del año pasado.
Estos maestros de la manipulación de los medios de comunicación han estado muy ocupados: su trabajo ha sido enviado a las “oficinas de las principales ONG del Reino Unido, así como a miembros del Parlamento del Reino Unido”, y se han abierto cuentas de YCHO en Facebook, Twitter, Instagram, Youtube y Gmail.
La cuenta de Twitter de YCHO tiene unos 10.000 seguidores pero, según la investigación, “la mitad de los seguidores de YCHO tienen menos de 10 suscriptores, mientras que 1.000 cuentas han creado cuentas el mismo día en 2016, una señal de que un número significativo de cuentas falsas y robots, está aumentando la popularidad de YCHO”.
Todo esto, concluye Irin, alimenta la sospecha de que, más que un intento genuino de ayudar al pueblo yemení, el plan pretende ocultar la situación en Hodeidah y restaurar la imagen negativa de Arabia saudí, o al menos un poco de ambas. Una estrategia para seguir matando de hambre a la población más hambrienta del mundo es difícil de vender. Pero el dinero no sólo habla, es silencioso, y 1.500 millones de dólares es mucho dinero...
https://www.irinnews.org/investigations/2018/02/06/yemen-pr-wars-saudi-arabia-employs-ukus-firms-push-multi-billion-dollar
https://movimientopoliticoderesistencia.blogspot.com/2018/03/yemen-otra-guerra-que-se-hace-con-tiros.html?utm_source=feedburner&utm_medium=email&utm_campaign=Feed%3A+MovimientoPolticoDeResistencia+%28Movimiento+Político+de+Resistencia%29