Recientemente la Red Latinoamericana de Jóvenes por la Democracia (JuventudLac), organización que preside Rosa María Payá, connotada contrarrevolucionaria de origen cubano y residente en los Estados Unidos, dio a conocer las ponencias que se presentarán en el marco del VI Foro de la organización que tendrá lugar en Lima, Perú, previo a la Cumbre de las Américas que patrocina la Organización de Estados Americanos (OEA).
Entre los trabajos que fueron aprobados supuestamente por la directiva de la red, pero en realidad forman parte de la estrategia global de Estados Unidos y la derecha que está en curso contra los países del ALBA, se destaca la presentación sobre algo que llaman “los retos de la democracia en el contexto electoral que vive hoy América Latina”.
A pesar que Rosa María Payá no fuera invitada al foro desarrollado el 15 de febrero en el Cannon House, edificio ubicado en 27 Independence Ave SE, Washington, DC 20003 y que se conoce como la sede de las oficinas de congresistas federales norteamericanos, para abordar las supuestas amenazas que enfrenta Estados Unidos en el hemisferio occidental, parece que su organización fue seleccionada para ejecutar parte de las indicaciones y acuerdos que en este marco “académico” se tomaron.
El foro promovido por el Instituto Interamericano para la Democracia (IID por sus siglas en inglés) se puede resumir como un nuevo episodio para legitimar la agenda intervencionista de la derecha y Estados Unidos en la región latinoamericana, previo a la Cumbre de las Américas.
En este marco se dieron cita congresistas de origen cubano como Ileana Ros Lethinen, Marco Rubio y Bob Menéndez, junto a varios académicos norteamericanos y representantes de tanques pensantes de dudoso prestigio como el controversial politólogo y periodista Carlos Alberto Montaner, la activista cubana pro Derechos Humanos María C. Werlau, presidenta de la Junta Directiva y Directora Ejecutiva de “Archivo Cuba”, así como el Nicaragüense Bosco Matamoros Hüeck, quien actuara como secuaz de la CIA desde la época de la contra en Nicaragua cuando se desempeñaba como Jefe de logística de este movimiento de paramilitares financiados, entrenados y respaldados por el gobierno norteamericano y su aparato de inteligencia.
Esto no es casualidad ni llama la atención tomando en cuenta que el boliviano Carlos Sánchez Berzain quien preside dicha institución, se encuentra en estos momentos compareciendo junto al ex presidente boliviano Gonzalo Sánchez de Lozada en un tribunal de Fort Lauderdale en Florida, Estados Unidos, por los hechos ocurridos en el 2003 denominados “octubre negro” donde ordenaron a militares la matanza de 67 personas que protestaban contra las políticas del gobierno, todo en nombre de la democracia.
El objetivo de este evento en Washington DC, fue darle fuerza y carácter científico a la hipótesis que indica al socialismo del siglo XXI como la principal amenaza que enfrenta Estados Unidos en la región, seguido de la presencia de Rusia en varios países de América Latina.
Temas como Venezuela, Cuba y Nicaragua fueron los blancos directos del ataque en este foro financiado por organizaciones sombrillas de la Comunidad de Inteligencia norteamericana que han ejecutado un rosario de acciones encubiertas en la región, pero siempre bajo el slogan de la promoción y defensa de la democracia.
Entre estas organizaciones se destacan el Diario de las Américas, el Instituto Interamericano para la Democracia, la contratista privada de inteligencia Heritage Foundation, el Center for a Secure and Free Society y la Fundación Cubana para los Derechos Humanos.
A pesar que nuestra redacción se interesó por contactar al equipo de trabajo de Rosa María Payá y JuventudLac para conocer los motivos de su ausencia en el evento, estos no respondieron.
Sin embargo, algunos allegados comentaron que Payá estaba organizando desde la piscina de su nueva mansión en La Florida la presentación de los resultados del “Premio Oswaldo Payá vida y obra” que también fuera abordado en este evento como parte de la agenda, de conjunto con el proyecto Cuba Decide para legitimar un cambio de gobierno en la isla.
Nuestra redacción conoció que entre las indicaciones propuestas por el congresista Bob Menéndez en uno de los recesos del evento fue trasladar a Rosa María Payá la necesidad de volver a concertar la entrega del Premio Oswaldo Payá en Cuba tomando en cuenta los resultados obtenidos el año pasado cuando fuera galardonado Luis Almagro.
Comentó Bob que esto sería una acción de ganar ganar pues si Cuba permitía la realización del evento se organizaría una campaña mediática fuerte para promover la imagen de Payá y el proyecto Cuba Decide este 8 de marzo, días antes del 11 de marzo cuando los cubanos saldrán a las urnas para elegir a los diputados de la Asamblea Nacional del Poder Popular en la isla.
Destaca el senador por el estado de New Jersey que, si la dictadura castrista obstaculizaba el evento, de igual forma ya estarían convocados los medios para armar un show al estilo de Hollywood y denunciar la supuesta arbitrariedad del gobierno cubano.
Según Bob esto serviría de pretexto para atraer la atención sobre el tema Cuba ante los medios regionales y retomar la supuesta violación de derechos humanos, falta de libertades y persecución violenta contra los activistas en la próxima Cumbre de las Américas, donde JuventudLac pretende abrir la jornada de trabajo de los jóvenes presentando una acusación contra la isla.
Desde el Cannon House Bob Menéndez le solicitó en llamada telefónica al Secretario General de la OEA, Luis Almagro, que respaldara esta iniciativa y agregó que se comunicara con los ex presidentes de derecha Pastrana, Tuto Quiroga y Vicente Fox para concertar las acciones, sabiendo de antemano que la Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA) sería el galardonado en esta segunda edición de los premios Oswaldo Payá.
Toda esta iniciativa respaldada por Bob Menéndez en su primer gran foro después de salir de un proceso judicial en Estados Unidos donde fue acusado por fraude, seguido de Ileana Ros Lethinen y Marco Rubio, tiene lugar en un contexto en que la OEA ha retomado con fuerza la agenda anti venezolana y el Grupo de Lima lidera los ataques contra el gobierno de Nicolás Maduro, considerando que esta es la punta del iceberg para la caída de todos los gobiernos progresistas que aún subsisten en la región.
Como parte del evento se abordaron los procesos electorales en la región latinoamericana, concluyendo que se debe continuar trabajando en favor de impedir que sean reelectas figuras afines con el ejemplo de la Revolución cubana en países como Venezuela, Bolivia y Brasil, seguidos de México, Colombia y más alejado en el tiempo El Salvador y Nicaragua.
La organización JuventudLac actuaría en un segundo momento de la estrategia para hacer el trabajo sucio, primero en Cuba con el show mediático que impulsa Rosa María Payá en este nuevo intento de ceremonia de entrega del citado Premio, y luego en Lima, Perú.
La red de jóvenes que preside esta opositora cubana, que se presume influyente, pero en realidad no suman más de 23 organizaciones en los 20 países donde tienen presencia en el área, intentará desacreditar en el VI Foro Juventud y Democracia a países como Cuba, Venezuela y Nicaragua, lo cual será sin dudas un nuevo intento fallido de la derecha regional.
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